El calvario de Andrés Iniesta que terminó en un bonito desenlace

Andrés Iniesta pasa por uno de los mejores momentos de su carrera. A sus 33 años, el centrocampista azulgrana ha logrado recuperar un nivel de juego que recuerda al de sus mejores tiempos. Algo que hacía tiempo que no sucedía. En una entrevista recogida por Marca, el de Fuentealbilla explicó como fueron sus duros inicios, antes de convertirse en uno de los jugadores más amados de la historia del club.

"Siempre tuve las ideas claras desde que llegué y era consciente de la intención con la que vine"

Sobre sus inicios, no guarda sus mejores recuerdos. "Los sigo recordando como lo que fueron, momentos muy dolorosos por el hecho de separarme de mi familia. Ahora sería un poco ventajista hablar de esa situación pasada, mirando atrás y viendo cómo ha ido todo. Lo que siempre he tenido claro es el camino a seguir", comentó.

Sin embargo, reconoció que siempre tuvo las ideas claras desde que puso el primer pie en La Masia. "Siempre tuve las ideas claras desde que llegué y era consciente de la intención con la que vine. Siento ese orgullo de haberlo dado todo para alcanzar las cosas que he conseguido", señaló el centrocampista.

Iniesta, sin embargo, negó cuando se le preguntó si en algún momento pensó en marcharse. "No, no tanto. Lo pasé muy mal pero siendo como era entonces y como soy ahora no lo hice. Al principio me costó mucho la adaptación, pero desde el momento en que decidimos venir, sabíamos que era un viaje para quedarme y cumplir mi sueño. Tenía claro que si daba el paso era para no volver", explicó.

Orgulloso de su camino

Pese a sus 33 años, Iniesta reconoció que todavía queda parte de ese niño inocente en él. "Quedan muchas cosas de ese chico, yo te diría incluso que la gran mayoría. Mi intención fue siempre ir creciendo como persona y a la vez como deportista. Y a día de hoy me siento feliz y orgullosos de ese camino que he recorrido", sentenció.