A pesar del resultado, Umtiti se doctoró en la final de la Eurocopa

No pudo ser y Samuel Umtiti se quedó con la miel en los labios después de ver como Éder le robaba a los suyos una Eurocopa que se habían merecido desde el primer día. Fue con un cruel tanto en la prórroga cuando Portugal lanzó contra las cuerdas a una Francia ya sin fuerzas. Antes, los galos le dieron un auténtico repaso a su rival pero no acertaron las mil y una ocasiones de las que dispusieron.

Tampoco se puede decir que los lusos pudiesen haber solucionado el partido durante los 90 minutos pues apenas gozaron de ocasiones claras hasta la prórroga. En parte gracias al partidazo de un Umtiti que definitivamente se ha doctorado en un partido de suma exigencia. Al zaguero no se le vio nervioso, sino todo lo contrario.

Controlando siempre los tempos y manteniendo a raya a Nani, el ex defensa del Olympique de Lyon volvió a demostrar todo lo bueno que lleva dentro. Contundente y potente físicamente, a Umtiti se le vio de nuevo con un gran manejo de balón, la cabeza siempre alta y unas decisiones correctas a la hora de jugarla.

Pues fueron mucho los balones que tocó y los pases que dio, sin llegar a errar ninguno durante los 120 minutos. El francés demostró un "estilo Barça" que parece deja claro que la secretaría técnica no se ha equivocado al comprarlo. Siempre anticipándose a todas las jugadas y nuevamente desplegando un buen juego aéreo, el central fue de lo mejor de Francia junto a Sissoko. El tanto final no se originó en su zona pero el zaguero trató de llegar a cubrir a toda prisa el disparo, aunque la distancia entre ambos era insalvable.

Cruel final para un Umtiti que ha ido de menos a más en los tres encuentros que ha sido titular con la selección francesa. A pesar de que se le ven grandes maneras y cualidades, al central ahora no le queda otra que evolucionar y adaptarse al FC Barcelona. Allí podrá volver a tener la oportunidad de ser campeón.