La presión que supone para Sampaoli dirigir a Lionel Messi

El entrenador de la selección de Argentina, Jorge Sampaoli, ha concedido en las últimas horas una rueda de prensa en la que ha valorado lo que supone para él el hecho de entrenar al mejor futbolista del planeta, Leo Messi, algo que no pasa todos los días pero de lo que él está pudiendo disfrutar desde hace unos meses, y espera que durante mucho tiempo más.

"Disfruto y a veces me genera una responsabilidad y una obligación estar dirigiendo al mejor del mundo, representando a la Selección de mi país como lo es Messi. La representación de tu pueblo no es un tema menor. Que hoy Leo sea el embajador del fútbol en el mundo, y que sea argentino, es una responsabilidad para mí, que debo dirigirlo", ha explicado en la rueda de prensa previa al amistoso contra Rusia.

"Sé que no puedo pedir al Barça que dosifique a Leo Messi"

Messi sólo jugará el amistoso frente a Rusia, dado que de esta manera podrá darle descanso de cara al segundo partido de Argentina en este parón, con el objetivo de que coja fuerzas de cara al exigente calendario que tiene por delante con el FC Barcelona.

"A Leo lo veo muy maduro. Puedo establecer un diálogo de entrenador a jugador. Sé que no puedo pedirle a su club que lo dosifique. Yo propuse que Messi juegue sólo un partido. Quizá él quería estar en los dos. Su felicidad siempre estuvo en el juego".

Argentina piensa en grande

De cara al Mundial de Rusia 2018, Sampaoli tiene claro que uno de los contrincantes a evitar para Argentina será España, aunque está decidido a enfrentarse a los mejores. "Uno de los rivales a evitar es España. Es un campeón del mundo, ya lo he enfrentado con Chile".

Piensa, además, que Giovani Lo Celso puede entenderse muy bien con Leo Messi en la cancha. "Lo que tiene Gio es que puede establecer un vínculo con Leo dentro del campo de juego. Para nosotros va a ser determinante encontrar vínculos dentro de la cancha con Messi. No debemos esperar todo el tiempo que él sea el argumento definitorio".

Y tiene claro que Argentina es capaz de ganar a cualquier selección del planeta, a pesar de que colectivamente le falte todavía seguir mejorando. "Hoy, individualmente, Argentina no tiene nada para envidiarle a ninguna selección. Nunca vamos a ser un equipo que espere".