PASADO EN EL REAL MADRID
El mensaje de Mourinho a sus dos puntales 'anti-Barça'
Publicación:24/06/2017 - 18:59h
Actualización:25/06/2017 - 01:27h
Con el final de la temporada llegó la retirada para algunos futbolistas, y dos de ellos fueron dos ex jugadores del Real Madrid: Álvaro Arbeloa y Xabi Alonso. José Mourinho, que les dirigió en su etapa madridista, les envió un mensaje en las redes
De José Mourinho siempre se suele ver la imagen que comunica, el entrenador duro, retorcido y locuaz que domina las salas de prensa y que ordena con mano de hierro los vestuarios de los conjuntos que siempre logra convertir en ganadores. Pero, pese a todo, los futbolistas con los que comparte equipo suelen hablar maravillas del portugués, al que consideran una persona cercana, dispuesta y con mucha capacidad para motivar.
Precisamente dos de sus mayores seguidores se retiran este año, y Mourinho no ha querido perder la ocasión para enviarles un mensaje de agradecimiento. Álvaro Arbeloa, Xabi alonso y el propio técnico de Setúbal coincidieron en su etapa en el Real Madrid, en el que ambos jugadores formaron parte del núcleo duro del preparador.
"El fin de una carrera o el inicio de otra. Con el mismo éxito con la misma dignidad. El fútbol precisa de Hombres", ha destacado el hoy entrenador del Manchester United, como dedicatoria en una foto en la que aparecen los tres.
Esta es la publicación de José Mourinho en redes sociales.
Tensión con el FC Barcelona
Precisamente José Mourinho, Álvaro Arbeloa y Xabi Alonso fueron tres de los sospechosos habituales en el torrente de Clásicos que vivió el portugués en su estancia en el Real Madrid, coincidiendo con el FC Barcelona en partidos de Liga, Copa del Rey, Champions y Supercopas.
La llegada del técnico a la capital supuso un aumento de la tensión entre los futbolistas de uno y otro equipo, y dos de los responsables fueron el lateral y el centrocampista, que llevaron su discusión a las convocatorias con la selección española, hasta donde salpicó la fricción de los enfrentamientos. Entradas a destiempo, malas caras, protestas e insultos fueron habituales en una etapa que, afortunadamente, azulgranas y merengues han conseguido enterrar.