Lo del Barça en Champions fuera de casa viene de lejos: 14-0 entre París, Roma, Turín y Liverpool

La goleada del Liverpool en Anfield es seguramente el mayor ridículo del FC Barcelona en su historia, al menos en Champions League. Los culés tenían todo a su favor para llegar a la gran final del Wanda Metropolitano. Habían ganado 3-0 en la ida sin hacer un buen partido y sin encajar ningún gol en su casa. Además, Mohammed Salah, Roberto Firmino y Naby Keita no jugarían la vuelta. Todo era favorable a los intereses azulgranas, que lo desaprovecharon de la peor manera posible.

Los de Jürgen Klopp fueron mucho mejores de principio a fin en su estadio y acabaron remontando a lo grande la eliminatoria. Los 'reds' ganaron 4-0 con goles de Wijnaldum y Origi, con sendos dobletes. El holandés y el belga fueron los héroes de los ingleses, que completaron un choque excepcional y superaron a los culés en todos los aspectos del juego.

La derrota es más dolorosa si cabe viniendo de donde venía el Barça. La Roma ya le sacó los colores a los barcelonistas en una remontada similar hace un año. Los de Valverde habían ganado 4-1 en la vuelta y llegaban al Olímpico siendo tan favoritos como llegaron a Anfield. Pero los romanos no perdonaron y con intensidad, fútbol y goles le dieron la vuelta a la eliminatoria. Tras ese fiasco parecía imposible que volvieran a caer en ese mismo error, pero el Liverpool demostró que las pesadillas pueden volver cuando menos se esperan y multiplicadas por diez.

Este será el cuarto año en el que el FC Barcelona no levanta la Liga de Campeones y ni siquiera llega a la final. Antes de las goleadas de Roma y Anfield, llegaron también las de París y Turín en la temporada 2016-2017. Primero fue la del Paris Saint-Germain en el Parque de los Príncipes. Los parisinos pasaron por encima de los culés en la ida de octavos y vencieron por 4-0. Por suerte para los azulgranas, en la vuelta completaron la noche más increíble que se ha vivido en la historia de la Champions y vencieron a los franceses por 6-1 en una remontada legendaria.

Pero ese año los barcelonistas tampoco tomaron nota de lo que pasó en octavos y en cuartos volvieron a salir goleados fuera de casa. El Camp Nou es un fortín, pero año tras año el Barça demuestra que fuera se empequeñece y se queda en nada. La Juvetus le sacó los colores en la ida de cuartos de ese año 2016-2017 y venció por 3-0 con un Dybala excepcional. Esta vez no hubo remontada y los italianos apenas sufrieron para empatar a 0 en Barcelona y pasar a semifinales.

El Barça, falto de carácter y capacidad competitiva

Si algo ha demostrado el FC Barcelona estos últimos años en Europa es que no tiene carácter a la hora de la verdad. Las goleadas fuera del Camp Nou denotan una falta de competitividad alarmante cuando los encuentros se ponen difíciles. Además, el hecho de haber recibido 14 goles en esas cuatro visitas y no haber podido marcar ninguno, habla muy mal de la capacidad de reacción azulgrana. En Liverpool volvió a pasar por enésima ocasión y ya nadie puede decir que vaya a ser la última vez que ocurra.