Las causas de la motivación extra de Ousmane Dembélé para la temporada 2018-19

La vida de Ousmane Dembélé ha dado un acelerón en los últimos meses, y la presión casi se lo lleva por delante. El galo ha pasado de confirmar en el Borussia Dortmund las buenas maneras que apuntaba en el Rennes a casi perderse en la exigencia del FC Barcelona, en un estreno con lesiones y dudas que le ha permitido brillar lo justo para meterse en el Mundial de Rusia.

El problema para el extremo es que con Francia tampoco acaba de consolidarse, porque Didier Deschamps prefiere un bloque más sólido y en él entran futbolistas con cualidades específicas o con más gol. A pesar de la vertiginosa ofensiva que forma junto a Antoine Griezmann y Kylian Mbappé, el seleccionador le sacrifica para meter a Olivier Giroud, ya que el de Chambéry le sirve para fijar defensas y favorece el juego con los otros dos puntas, igual de rápidos pero más letales que el de Vernon.

Así, y a pesar de que disfrutaría el posible título como cualquiera -y con total merecimiento por los minutos que ha tenido-, tiene muchas esperanzas puestas en el curso 2018-19, porque quiere confirmarse y demostrar su calidad tanto a nivel de club como en el combinado nacional. Aparcados los líos que envolvieron a su fichaje y con una pretemporada a la vista, podría encontrar el camino adecuado de cara a la temporada oficial.

Dembélé quiere dar la talla en el Camp Nou

El primer paso para el francés será ganarse la confianza de Ernesto Valverde, lo que pasa por una buena preparación física para lograr aguantar los partidos al máximo. Él mismo reveló al final de la pasada campaña que aún estando sano le costaba responder a las peticiones del míster de colaborar en defensa, porque no logró alcanzar su tope por la gran cantidad de tiempo que estuvo parado.

De esta manera, tiene plena confianza en que llegarán las grandes sensaciones que quedaron al final del curso anterior, transformando los chispazos para convertirse en un crack mucho más regular. Esto es de vital importancia si quiere hacerse un hueco en el once, porque igual que pasa en Francia, sabe que empieza en desventaja respecto a estrellas consagradas como Leo Messi, Luis Suárez o Philippe Coutinho.

El plan de Dembélé pasa por aprovechar a máximo unas rotaciones que este año podrían ser más frecuentes, y a través de las que podría ganarse los galones a medida que avancen los compromisos. Con mucha confianza, motivación y un conocimiento más profundo del equipo y de su entorno, este puede ser su año.