BATACAZO SONADO DE UN ASPIRANTE EN BALAÍDOS
El Celta de Vigo sigue alejando al Atlético de Madrid de LaLiga (2-0)
Publicación:1/09/2018 - 19:04h
Actualización:2/09/2018 - 02:56h
Empezaba la temporada como un aspirante a todo, pero poco a poco, el Atlético de Madrid puede estar diciendo adiós a LaLiga. En un partido desafortunado de los rojiblancos, el Celta de Vigo les ha castigado en Balaídos, de donde salen más lejos del liderato
El Atlético de Madrid empezó el curso ganando la Supercopa de Europa y con muchas ganas de aspirar a todos los títulos en juego, pero de momento ya le está fallando LaLiga. El empate de la primera jornada contra el Valencia lo hizo bueno una sufrida victoria contra el Rayo Vallecano en la segunda, pero en la tercera quien le sacó las vergüenzas fue el Celta de Vigo. El liderato se aleja para los 'colchoneros'.
Las sospechas rojiblancas empezaron con la alineación del Cholo Simeone, que pasó por completo de fichajes y optó por reforzar la medular y mover a Stefan Savic al carril derecho. Esto provocó un atasco que aprovecharon muy bien los gallegos, que dominaron una primera media hora con escasas ocasiones aprovechando el desconcierto visitante.
En el último cuarto de hora del primer tiempo sonaron las cornetas de los madrileños, y la ofensiva a punto estuvo de valer algún gol. Subió la velocidad en los pases, se activaron Antoine Griezmann, Saúl y compañía y los locales pasaron bastantes aprietos, aunque por suerte el descanso llegó justo a tiempo para evitarles un disgusto.
Godín y Savic fallan y entierran al Atlético
Los problemas para el Atlético llegaron en cuanto arrancó la reanudación, porque Diego Godín se resbaló al recibir un envío inocente de Filipe Luis y Maxi Gómez se marchó solo hacia portería. Tuvo mala suerte el central pero también pecó de excesiva lentitud en su reacción, algo que no perdonó su compatriota y subió el primero al marcador. Disparó seco, cruzado y abajo y esta vez Jan Oblak no pudo obrar el milagro.
El uruguayo iba a ser protagonista también del segundo, porque sirvió un centro para que Iago Aspas hiciera enloquecer a la grada. Dos 'picotazos' que ponían los tres puntos muy de cara antes de que se allanaran todavía más, porque en el camino hacia el 90, Savic se movió al centro y vio una segunda amarilla que olía a sentencia. De nuevo miradas hacia el Cholo, porque dos minutos antes había retirado a un José Giménez que no estaba amonestado.
Ni siquiera el final fue relajado, porque hubo VAR y ocasiones aunque el electrónico ya no volvió a variar. Un fuera de juego milimétrico impidió que Gustavo Cabral apuntara el tercero, y Oblak frustró a Hugo Mallo cuando lo intentó. En el lado contrario, Nikola Kalinic reclamó un penalti que parecía, y Griezmann rozó una diana que tampoco llegó. Van una victoria, un empate y una derrota en tres partidos, algo que sabe a muy poco a un Atlético que aspira a mucho más.
