Las cuentas pendientes de Valverde en este 2019

Antes del parón de selecciones de este mes de noviembre, el FC Barcelona cosechó dos resultados dolorosos: una derrota contra el Levante en LaLiga Santander y un empate ante el Slavia Praga en Champions League que no fueron olvidados por la posterior victoria contra el Celta de Vigo. Las sudas que había en el barcelonismo se acentuaron y nuevamente se apunta a Ernesto Valverde.

Ahora ha llegado el momento de que el técnico extremeño dé un golpe de autoridad y solucione unos cuantos asuntos importantes antes de que termine 2019. El calendario hasta final de año será denso y con partidos muy duros y determinantes, por lo que no hay tiempo para más dudas: el Txingurri está obligado a dar con la tecla para seguir arriba en todas las competiciones.

Dar dinamismo al juego

Uno de los aspectos que Ernesto Valverde debe solucionar es el del juego plano, previsible y monótono que está ofreciendo el equipo en su versión más habitual de esta temporada. Con la ayuda de Frenkie de Jong, que es un jugadorazo, y de Arthur Melo, que está más atrevido que la pasada campaña, hay que empezar a elevar la circulación de balón.

Naturalmente, para ello es muy importante que los de arriba ofrezcan desmarques y soluciones. Ahí entran los Ousmane Dembélé, Antoine Griezmann o Luis Suárez, que están de sobras capacitados para romper las líneas rivales con sus desmarques y con sus constantes movimientos. Naturalmente, las instrucciones del Txingurri son cruciales para que todo el sistema funcione.

Frenar la fragilidad defensiva

En su primer año en el Barça, Ernesto Valverde consiguió que el FC Barcelona ganase una solidez defensiva inusual en el conjunto azulgrana. Era muy complicado marcarle un gol a ese equipo, así como era muy fácil encajar uno en cierto momento del partido. Desde la pasada campaña y tras el cambio de sistema de 4-4-2 a 4-3-3, el castillo de naipes se vino abajo.

A día de hoy, el Barça es un equipo muy poco fiable en la zaga y que recibe tantos con demasiada facilidad. Lógicamente, no solamente es un problema de los cuatro defensas, sino de un sistema de presión sobre el rival que no está funcionando. El equipo está demasiado separado y los oponentes encuentran espacios constantemente.

Partidos clave

Antes de acabar el año, el FC Barcelona se las verá con Borussia Dortmund e Inter de Milán en Champions League y con Real Madrid y Atlético en LaLiga. Cuatro partidos que pueden determinar el porvenir de los azulgranas en ambas competiciones y que requerirán planteamientos acertados de Valverde, que no siempre está acertado en las grandes citas.

El rol de los fichajes

El único fichaje que está cumpliendo con las expectativas es Frenkie de Jong, que curiosamente es el único recién llegado que no fue petición expresa de Valverde. El Txingurri suspiraba por los fichajes de Antoine Griezmann y de Junior Firpo y, ahora que los tiene, no sabe dónde colocar al francés para que rinda y al hispano-dominicano, directamente, no le da bola. Naturalmente, es importante que ambos sumen.

Las lesiones

"Nunca doy mucha importancia a la preparación física", dijo el entrenador del FC Barcelona a finales de septiembre. A mediados de noviembre, el equipo azulgrana está batiendo todos los registros de lesiones habidos o por haber. ¿Habrá conexión entre la frase de Valverde y el número de lesionados? Pues, tal vez. Y tal vez también sea hora de ponerle solución al tema.

Los repudiados

Ivan Rakitic, Carles Aleñá, Moussa Wagué, Junior Firpo... Ninguno de ellos están teniendo las oportunidades que merecerían y, desde el principio, se contó con ellos. Lo que deberían ser cuatro cartas para jugar en beneficio del equipo se han convertido en cuatro problemas como cuatro castillos.