El Barça alega que MCM tenía "expectativas desmesuradas"

Este lunes ha comenzado el juicio en el que la empresa publicitaria reclama 100 millones de euros al Barça por incumplimiento de contrato. El Barça alega que MCM tenía unas "expectativas desmesuradas" de negocio en la explotación publicitaria de la nueva Masía

Esta empresa acusa al club azulgrana por incumplimiento de contrato en la explotación de la publicidad de las instalaciones de la Ciudad Deportiva utilizando un innovador soporte publicitario a través de diodos de luz. Dos vicepresidentes del Barça, Jordi Moix y Javier Faus, y dos ex presidentes, Joan Laporta y Sandro Rosell, ya han declarado.

Según el testimonio de los diferentes representantes del Barça, la fachada de la Masía no era el gran negocio que preveía MCM. No había interés real en las empresas por anunciarse en un momento de quiebra de la contratación publicitaria, y menos a los precios que pretendía la parte demandante. "Tenían unas expectativas desmesuradas", comentó Boix. El Barça admite que MCM les hizo llegar el interés de alguna empresa, pero que era incompatible con los patrocinadores que ya tiene el club para ser del mismo sector.

"Ellos tenían unas expectativas de negocio y, en plena crisis, el mercado de la publicidad cayó de manera drástica. A mí me encantaría que me trajeran un acuerdo por 20 millones, porque la mitad serían para el Barça, pero nunca lo han hecho. Pero el contrato sigue vigente y se puede seguir intentando", señaló Javier Faus.

Sandro Rosell ha recordado que el contrato se firmó en los últimos meses de la directiva de Laporta y que lo único que hizo fue reducir la duración de 25 a 5 años. "Me sorprendió que sabiendo que entraba un nuevo gobierno hubieran firmado este contrato y, además, por tanto tiempo", dijo.

Laporta, sólo en catalán

El momento tenso de la sesión ha llegado cuando Joan Laporta ha insistido en hacer la declaración en catalán, y el abogado de MCM, el mediático Mario Conde, le recriminó su actitud. La vista ha estado a punto de aplazarse por la falta de un traductor, pero finalmente se ha podido hacer sin más incidencias.