La pegada del Barça: a falta de juego, buena es puntería

Ya hace décadas, desde la 'era Johan Cruyff', que el FC Barcelona​ tiene una filosofía basada en el juego ofensivo de posesión. En el Camp Nou no solamente se exige que el equipo gane partidos y títulos, sino también hacer lo con un juego vistoso de acuerdo con los valores que se transmiten en la Masia.

Ya hace años que iconos de este estilo de juego como Xavi Hernández o Andrés Iniesta no juegan en el equipo culé y, desde entonces, el club ha intentado reemplazarlos con fichajes que tengan un perfil similar -como los de Arthur Melo o Frenkie de Jong- y cuidar a futbolistas de la Masia como Riqui Puig para que triunfen. El club está intentando recuperar ese juego que enamoraba, aunque está siendo complicado.

El club ha hecho una apuesta para recuperar el juego vistoso y Ernesto Valverde trata de adaptar al equipo para recuperar su mejor versión pero, de momento, está costando que eso suceda. A los culés les está faltando velocidad en la circulación de pelota, profundidad en sus jugadas de ataque y una presión más ordenada que permita recuperar la pelota arriba evitando así los contragolpes del rival.

La apuesta por el juego no está acabando de salir y se nota que se necesita tiempo aunque, por el momento, el Barça está tirando de la calidad individual de sus futbolistas para sacar los partidos adelante. Sin ir más lejos, tres de los cuatro goles que el FC Barcelona marcó ante el Sevilla nacieron a partir de la calidad individual de la 'MSD' y solamente el de Vidal se forjó con juego colectivo.

En el primer tiempo, Luis Suárez se sacó un gran remate de chilena y Ousmane Dembélé un jugadón individual por la banda. Ya en el segundo tiempo, Leo Messi 'mojó' con un libre directo que mandó a la jaula tras un gran lanzamiento. Es por ello que, a falta del juego que el barcelonismo espera ver, el equipo azulgrana está sacando adelante los partidos gracias a las individualidades.

Que la pólvora siga seca

Ernesto Valverde tiene deberes pendientes para que el equipo recupere el buen juego pero aun y así es difícil de negar que un equipo con Messi, Suárez, Dembélé y Griezmann no aspire a ganarlo todo. Son cuatro futbolistas capaces de resolver un partido gracias a su calidad, por lo que se espera que las escopetas de este póquer de cracks siga bien cargada.