Valverde y su inexplicable desconfianza en los jóvenes

Ernesto Valverde está en el foco desde hace tiempo por ser un técnico resultadista, pero con la humillación sufrida por el equipo en la Champions League contra el Liverpool acabó de hacerle ganar detractores. Voces críticas que señalan al Txingurri por haber abandonado el estilo ofensivo de posesión y por no confiar en los jóvenes.

Al César lo que es del César: el Txingurri ha ganado dos de dos en LaLiga y puede completar su segundo doblete con otra Copa del Rey. Pero su metodología resultadista está puesta en entredicho. Especialmente porque su filosofía de apostar por lo conocido y no arriesgar parece tener efecto positivo de inmediatez, pero genera dudas en cuanto a un proyecto a largo plazo.

Valverde confía en los de siempre, y ni el fracaso ante la Roma le convirtió en alguien más rompedor. La juventud y los futbolistas de proyección no parecen entrar en sus planes. No lo han hecho en dos temporadas ni parece que lo vayan a hacer. Eso va no solo por los canteranos, sino también por los jugadores del primer equipo.

Ejemplos claros son los de Arthur o Malcom. El primero de ellos, titular toda la temporada, cayó de las alineaciones en los partidos cruciales de Champions y, cómo no, la apuesta salió rana. Tampoco importó que Malcom marcase goles importantes en momentos complicados: a la hora de la verdad, no se confió en él.

La Masia, perjudicada

Por no hablar de los jugadores de La Masia, una de las mejores canteras del mundo. Desde que el técnico extremeño es el primer entrenador, pese a que tiene en el filial a un bloque entero que ganó la Youth League, no hay oportunidades. El papel de algunos jugadores como Riqui Puig, Aleñá o Collado se ve reducido a partidos intrascendentes, siendo residual.

El único 'intento' de apuesta de Valverde fue el de Juan Miranda como relevo de Jordi Alba, pero una mala primera parte en un partido de Copa del Rey contra el Levante bastó para que el Txingurri ya no confiase más en él y, de hecho, ha pedido el fichaje de un lateral veterano que le tapará la progresión.

La metodología de Valverde no se cuestionaba cuando había resultados pero, tras el fracaso en Champions, hay dudas tanto en el proyecto deportivo inmediato como de cara al futuro. Con un equipo alejado de su habitual juego alegre y una cantera apartada de los planes inmediatos, cuesta vislumbrar algo que se aleje de los fichajes a coste millonario.