Laporta suspende en su primer mercado como presidente del Barça

Joan Laporta llegó al FC Barcelona hace unos meses tras ganar las elecciones con la difícil misión de hacer renacer de sus cenizas al conjunto azulgrana. Tras una gestión deficitaria en lo económico y en lo deportivo de Josep Maria Bartomeu y su Junta Directiva, 'Jan' aterrizaba en el Camp Nou para devolver al Barça a la élite mundial. Sin embargo, los graves problemas financieros de la entidad se lo han puesto muy complicado al nuevo presidente.

El máximo mandatario barcelonista prometió e insinuó ciertas cosas durante la campaña y en sus primeros meses al mando que al final no se han cumplido. El abogado y empresario era consciente que las cosas estaban mal en lo económico, pero el tiempo ha demostrado que no sabía hasta qué punto lo estaban. Por ello, el catalán ha tenido que tomar ciertas decisiones delicadas y polémicas en lo deportivo para poder empezar a solucionar todo lo referente a la economía.

Sin embargo, pese a la necesidad de tomar ciertas decisiones delicadas por el bien del club, muchas de ellas han afectado y afectarán directamente al equipo para mal. Por ello, puede decirse que en lo deportivo Laporta ha suspendido en su primer mercado como presidente del Barcelona. La no renovación de Leo Messi​ ha sido su gran lunar, pero el 'regalo' de Antoine Griezmann al Atlético de Madrid ha sido lo que le ha terminado por hundir.

Yendo punto por punto y comenzando por lo del argentino, 'Jan' tiró de optimismo durante todo el verano y usó al '10' en su campaña asegurando que solo él podía renovarle. Todo parecía hecho, pero de repente el club 'rompió' el acuerdo que tenía con el padre de Leo por no poder cumplirlo económicamente hablando. El 'presi' reconoció que tuvo que renunciar al atacante por la supervivencia de la entidad y el Barça se quedó sin el mejor jugador de su historia, sin su gran referente y sin su máximo goleador.

Tras Messi, la siguiente misión de Laporta era dar salida a los Miralem Pjanic, Samuel Umtiti o Philippe Coutinho, jugadores con fichas altísimas que no contaban para la entidad. Sin embargo, el mandatario no ha podido o no ha sabido conseguir que alguno de ellos salga y todos seguirán por lo menos hasta enero. Los sueldos que les firmó Bartomeu han jugado en contra del abogado, que no ha podido superar esta losa.

La operación de Griezmann, un desastre en lo deportivo.

Por otro lado, al final ha decidido prescindir de Griezmann, a quien ha cedido dos años al Atlético. En este caso, por lo menos ha logrado que los colchoneros compren al delantero cuando acabe el préstamo y se encargue de los 20 'kilos' que cobra durante las dos próximas campañas. No obstante, esto no quita que deportivamente la operación carezca de sentido, ya que el francés, pese a sus defectos, era probablemente el mejor atacante de la plantilla y su pérdida será más que dolorosa. Además, 'regalarle' al cuadro colchonero, que viene de ganar LaLiga, es pegarse un tiro en el pie en las aspiraciones de los culés de conquistar el título.

También se puede criticar la venta de Emerson Royal por 25 millones al Tottenham. Restando los 9 'kilos' que se pagó al Betis por él hace un mes y los 5 que se llevan los sevillanos del traspaso ahora, las ganancias son solo de 11 millones. Además, el fichaje de Luuk de Jong, que jugará cedido en el Camp Nou un año, es incomprensible en lo deportivo. El holandés parece que no da la talla y llega del Sevilla como descarte, algo que no habla precisamente bien del Barça.

Cabe decir también que la marcha de Ilaix Moriba también es consecuencia de la decisión de Laporta de no ofrecerle el sueldazo que pidieron sus agentes. No obstante, en este caso, nadie rebate al mandatario, que hizo lo que tenía que hacer y sacó 16 millones por su venta acabando contrato en 2022. Una venta necesaria por la situación que en lo deportivo no tendrá mayores consecuencias, ya que Nico González, que será su relevo, tiene tantas o más condiciones que él.