Lewandowski aguarda su fichaje por el Barça en territorio español

Tras culminar las primeras cuatro jornadas de la UEFA Nations League con Polonia, Robert Lewandowski ha regresado con su familia para dar inicio a unas merecidas vacaciones. El atacante está pasando sus días libres en su nueva residencia en Mallorca en compañía de su esposa y sus dos hijas, Kiara y Laura, para liberar las tensiones producidas en la recta final de la campaña.

El polaco parece estar encantado con el estilo de vida en España, y las presiones que ha hecho al Bayern Múnich para que le dejen salir al Barcelona son prueba de ello. Los culés le tienen como su objetivo número uno para este mercado estival y el '9' ha dejado claro que su deseo pasa por 'cambiar de aires' en las próximas semanas. Los alemanes se han cerrado en banda porque afirman que todavía le resta un año en su contrato y debe cumplirlo en su totalidad.

Sin embargo, todo apunta a que las posturas podrían cambiar después de los resultados de este jueves en la Asamblea de Compromisarios, donde la directiva del Barça buscará la aprobación de la venta de 49.9% de 'BLM'. De ser aprobada, las arcas de la institución tendrán un ingreso importante para acometer fichajes y una nueva oferta por los servicios de Lewandowski podría llegar a las oficinas bávaras.

De momento, el ariete se mantendrá en compañía de sus seres queridos pero estará a la expectativa de lo que su suceda con su aterrizaje en el Camp Nou. El fichaje de Sadio Mané parece estar totalmente encaminado por el Bayern, lo que facilitaría en gran medida su salida. Xavi Hernández le considera una pieza clave en su proyecto deportivo, más aún con la inminente salida de Ousmane Dembélé.

 

 

 

 

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Oferta superior

Pese a que el Chelsea, Paris Saint-Germain y Manchester United se han mantenido tras los pasos del goleador, lo cierto es que la propuesta blaugrana es superior a la de sus competidores. La directiva tiene pensado contratarle por dos temporadas con opción a una tercera en base a rendimiento, mientras que los demás clubs apenas consideraban una campaña con opción a otra. De hecho, el propio Bayern solo le ofreció un año en la última oferta de renovación, lo que detonó que comenzara a forzar su salida.