El PSG de Neymar endosa un 'set' a un desafortunado Saint-Étienne (6-1)

El mercado de fichajes está provocando numerosas noticias sobre el PSG, pero este miércoles sólo dio que hablar por su fútbol. El conjunto de la capital pasó de ronda en la Copa de la Liga a lo grande, porque no falló en el Parque de los Príncipes y arrolló a un desafortunado Saint-Étienne. Thomas Tuchel apostó por el once de gala y la apuesta le salió redonda, ya que resolvió con un particular juego, set y partido.

Los 'bleus' apenas tardaron dos minutos en estrenar el marcador, y el gol de Mauro Icardi les allanó el camino. Thomas Meunier metió un pase en profundidad para el argentino y este disparó sin apenas ángulo, lo que sorprendió a un guardameta que no supo despejar. Con el viento a favor tan pronto, los locales se relajaron, y sus descuidos obligaron intervenir a un Sergio Rico que confirmó que también estaba enchufado.

La primera mitad sólo trajo disgustos para los 'verts', y el siguiente fue la expulsión de Wesley Fofana. El zaguero zancadilleó a Ángel Di María y vio su segunda tarjeta amarilla, lo que dejó a los suyos con uno menos y una hora de partido por jugarse. Ya con pista libre y en poco antes del descanso, el equipo de casa puso la sentencia, con un pase del 'fideo' que Neymar correspondió con una 'picadita' para superar al portero.

A la ya habitual celebración del '10', llevándose la mano a la boca y pidiendo silencio, le siguió el tanto más surrealista de la jornada, adjudicado en propia meta a Jessy Moulin y tras una carambola espectacular. Kylian Mbappé cedió un taconazo para el ex del Real Madrid y este puso el cuero al corazón del área, donde Timothée Kolodziejczak intentó despejar, golpeó a Loïc Perrin, el rebote fue al palo, al arquero y al fondo de la red.

El PSG se divierte ante su afición

Los pupilos de Claude Puel estaban viviendo un calvario, y aún sería mayor en una reanudación en la que el PSG amplió su ventaja. Al poco de estrenar el segundo tiempo Di María robó un balón en la medular, lo abrió para Mbappé y este tiró el pase de la muerte, para que Icardi embocara aunque a su lado había otros dos compañeros que hubieran podido rematar. El encuentro iba a ser muy largo para los visitantes.

La superioridad numérica hizo que el campo se inclinara todavía más hacia la portería de Moulin, y más con una defensa que sufría con la alegría de los parisinos. El nueve selló su 'hat-trick' antes de cumplirse la hora de juego, en una acción en la que Neymar lanzó la carrera del francés, este avanzó metros y optó por regalar al ex del Inter de Milán la diana que certificaba que se iba a llevar el esférico firmado a su casa.

El final del recital de los 'bleus' llegó con los papeles intercambiados, con Di María lanzando una asistencia excepcional, el punta bajándola con un control de muchos quilates y devolviendo el presente a Mbappé, que se lanzó con todo para marcar. Sólo cuando los locales acabaron su faena pudo recortar el Saint-Étienne, gracias a un penalti que Rico paró primero a Yohan Cabaye antes de que este remachara de cabeza.