El balón parado es el gran 'talón de Aquiles' del Barça

Medirse ante el Athletic Bilbao en octavos de Copa era una de las cosas que menos deseaba Xavi Hernández. El conjunto vasco contaba con todas las armas para poder llevarse la eliminatoria, que además era a partido único en San Mamés. Sin embargo, los de Marcelino García necesitaron de la prórroga para poder sellar su pase a la siguiente fase, no sin antes continuar con su racha de goles a balón parado, una verdadera 'sangría' para el Barcelona.

Y es que los 'leones' son unos especialistas en el juego aéreo. El 35 por ciento de sus goles en Liga llegan por esta vía (7/20), sin tener en cuenta los que ha marcado en otras competiciones. Es importante recordar como consiguieron su pase a la final de la Supercopa de España ante el Atlético de Madrid, en lo que fue una remontada que inició precisamente con un gol de cabeza de Yeray después de un córner de Iker Muniain. 

Ante el Barça, la historia se repitió. Después de una falta, el Athletic puso en práctica su 'fórmula mágica' y consiguió un remate de cabeza de Berenguer para que Íñigo Martinez terminara de consumir el calvario culé. Los catalanes son uno de los peores equipos españoles defendiendo las jugadas preparadas a balón parado, y es el que más goles encaja por esa vía. Aunque tenga defensores de la categoría de Gerard Piqué y Ronald Araújo, las debilidades y fortalezas entre ambos equipos se alineaban perfectamente. Y es que de los 477 duelos aéreos que ha tenido el Barcelona en la temporada, 228 los ha perdido. Casi un 48 por ciento. 

Los de Aitor Elizegi remataron en 19 oportunidades, casi triplicando la productividad ofensiva azulgrana, que apenas llegó en siete ocasiones. De esas siete, solamente tres fueron a puerta. Uno fue el gol de Ferran Torres. Parece que todo el trabajo construido en el partido ante el Real Madrid se ha venido abajo, y es la debilidad defensiva lo que hace vulnerable al conjunto de Xavi Hernández. Los blaugrana pierden la mitad de sus duelos defensivos, he ahí la necesidad de reforzar la zaga tanto en el mercado invernal como en el veraniego. Aunque Dani Alves siga demostrando estar a la altura a sus 38 años, ya las 'vacas sagradas' necesitan un recambio que 'aclare' el panorama en la Ciudad Condal.

Un viejo problema

Las fallas defensivas del Barcelona es una problemática que ha arrastrado el club desde la salida de Ernesto Valverde del banquillo. Con Ronald Koeman, ya el equipo era un coladero en el fondo, sin tomar en cuenta el vergonzoso (2-8) ante el Bayern en aquella fatídica Champions League que estuvo arropada por el COVID. Las carencias en la zaga deben ser atendidas, y el mercado de fichajes cierra en tan sólo 10 días.