Luis Suárez jugó los dos últimos partidos de Copa América 2019 con un dedo roto

Seguramente Luis Suárez todavía no se ha quitado de la cabeza el penalti fallado en la tanda final contra la selección de Perú, que propició la eliminación de Uruguay en la ronda de cuartos de final de la Copa América 2019. El charrúa del FC Barcelona fue el único que erró, y los peruanos avanzaron hacia las semifinales sin haber lanzado a portería en todo el partido.

Luis Suárez rompió en lágrimas tras la eliminación de Uruguay. Se sentía culpable, y sus compañeros fueron a consolarle. Ellos saben que nunca se puede dudar del '9', ni de su calidad ni por supuesto de su implicación. Porque Luis Suárez, según ha revelado en las últimas horas el medio uruguayo 'Referí', tuvo que jugar los dos últimos partidos de Copa América con un dedo fracturado.

La lesión fue en el cuarto metatarsiano de la mano izquierda y se produjo en el partido de la fase de grupos contra Japón, tras el cuál el futbolista tuvo que acudir a un hospital de Porto Alegre para tratarse. Según explica 'Referí', la información sobre la fractura de Luis Suárez se mantuvo oculta durante el torneo, tanto para los rivales como para los medios.

En el seno de la delegación charrúa se hablaba de un golpe, y eludía mencionar una fractura. El Médico Jefe de la Selección Uruguaya, el Doctor Alberto Pan, fue preguntado por un periodista si Luis Suárez "tenía una fractura", y su respuesta fue que existían "trazos" en el cuarto metatarsiano de su mano izquierda, pero sin confirmar la existencia de dicha fractura.

"El jugador no tiene dolor espontáneo", añadió, explicando que se le había colocado una "férula por precaución". También señaló que "no corre riesgos" para el partido contra Perú, y lo cierto es que a Luis Suárez se le pudo ver intenso en el encuentro. El VAR le anuló un gol y aparentemente no tuvo ningún problema, pero seguro que no es nada cómodo jugar con un dedo roto.

Luis Suárez lo dio todo por Uruguay

Si la información de 'Referí' está en lo cierto, hay que valorar de forma positiva la voluntad de Luis Suárez de ayudar a su selección, a pesar de no estar al cien por cien físicamente. Luis Suárez no quería perderse las citas ante Chile y Perú, y se dejó la piel para intentar que la celeste llegara lo más lejos. No pudo ser... Pero nadie puede reprocharle nada.