Varios jugadores del Barça, hartos de que se les relacione con trueques

Con el fútbol parado a nivel internacional por culpa del coronavirus, las informaciones y rumores sobre fichajes se han incrementado en comparación a meses anteriores, y a pesar de que aún falta mucho para que se abra el mercado estival. El FC Barcelona tiene claros sus objetivos para la delantera, y cada vez son más los medios de comunicación que señalan a jugadores de la plantilla culé como 'carnaza' para intercambios.

Este próximo verano habrá pocos fichajes multimillonarios, y lo más probable es que muchos de los acuerdos se lleven a cabo intercambiando jugadores como si de cromos se tratase. Recientemente, algunos jugadores del FC Barcelona ya han mostrado su malestar por esta situación. Ivan Rakitic fue el último de ellos, asegurando que no es "un saco de patatas" y que es él quien quiere decidir dónde juega.

Otros jugadores como Griezmann, Dembélé, Arturo Vidal y Junior Firpo han desmentido en los últimos meses diversas informaciones que les situaban en otros clubes, o formando parte de operaciones de intercambio para garantizar la llegada de Neymar Jr y/o Lautaro Martínez.

En este punto, si los rumores proliferan y aumenta el 'cabreo' de los protagonistas, es posible que el FC Barcelona se enfrente a una situación de 'guerra fría' en la que sus jugadores se nieguen a formar parte de operaciones masivas y aprieten para cumplir el contrato que tienen firmado con la entidad culé.

Los jugadores podrían presionar para quedarse

Cabe tener en cuenta que Rakitic y Arturo Vidal tienen contrato vigente hasta junio de 2021, y aun podrían aguantar una temporada más en el Barça para, posteriormente, marcharse con la carta de libertad. Se trata de una situación que ya se ha dado en otros grandes clubes con jugadores que se han negado a renovar y se han ido gratis, como cuando la Juventus se hizo con los fichajes a coste cero de Rabiot y Ramsey, procedentes de PSG y Arsenal.

El tiempo dirá quién acaba llegando y quién se marcha. Sea como sea, Quique Setién tampoco espera que se produzca una revolución en la plantilla, sino el refuerzo de algunas posiciones concretas para mejorar el nivel competitivo del equipo y seguir luchando por todos los títulos.