Partidazo del barcelonista Marc Cucurella, que fue decisivo en el Eibar-Real Madrid

Buscaba una victoria más para añadir a la brillante racha de Santiago Solari, pero el Real Madrid se dio un batacazo en Ipurua que supuso la primera derrota del argentino como técnico del primer equipo 'merengue'. El Eibar le sorprendió con una gran actuación en lo colectivo, pero con algunos nombres que brillaron en lo relativo a rendimiento individual.

Una de las claves del enfrentamiento fue, sin duda, Marc Cucurella, que se desfondó para ayudar a sus compañeros en defensa y además estuvo acertadísimo en ataque. José Luis Mendilibar apostó por un doble lateral colocando al de Alella por delante de Jóse Ángel, y aunque algunos valoraban su ajuste como demasiado defensivo, lo cierto es que la jugada no le pudo salir mejor.

El catalán reventó por el perfil izquierdo a una defensa que no está para muchos sustos, y encontró un agujero a la espalda de Álvaro Odriozola hasta que el ex de la Real Sociedad tuvo que marcharse lesionado. Por el camino cayeron dos goles para los armeros, e incluso cuando salió Dani Carvajal, otra acción por la misma banda colgó el 3-0 del marcador.

El primer tanto del encuentro se inició con una contra que Fabián Orellana abrió a banda y que el canterano azulgrana metió en el área, con una serie de centros que fue un incordio para la retaguardia 'merengue' y que casi siempre encontraron rematador. Una serie de rebotes permitieron abrir la lata, y tras el descanso, primero Sergi Enrich y después Kike (tras un toque del balear) se beneficiaron de los pases del recolocado extremo zurdo.

El Barça no se olvida de Marc Cucurella

Del cruce entre guipuzcoanos y madrileños estaba muy pendiente el FC Barcelona, que dejó salir cedido a Cucurella pero no se olvida de él. Juan Miranda le ganó la partida en la pretemporada y se quedó en el filial y como refuerzo de emergencia para el primer equipo, aunque ambos están llamados a ser relevos a medio-largo plazo para un conjunto que busca refuerzos en el lateral.

Tras asegurar la renovación de Jordi Alba, los culés esperan resolver también la incógnita de su suplente, ya que es muy pronto para el sevillano -apenas tiene 18- años, pero tampoco se quiere cortar su progresión con un fichaje de larga duración. Su ex compañero podría ser una solución si sigue progresando a este nivel.