Messi y Suárez, rivales en el tremendo anuncio de Gatorade

Además de ser dos de los mejores jugadores del mundo, Leo Messi y Luis Suárez mantienen una química dentro y fuera de los terrenos de juego que hace que el FC Barcelona sea todavía más letal en ataque. El nuevo 'spot' de Gatorade, sin embargo, revela un hipotético escenario en el que el argentino y el uruguayo se 'pican' por la llegada del Mundial de Rusia 2018, en el que dejarán de ser compañeros para convertirse en rivales.

La ficticia rivalidad de los dos protagonistas del anuncio resulta hilarante y, además, se lleva hasta límites insospechados. Messi niega a Luis Suárez goles en los entrenamientos, hace que su perro se mee en el jardín del charrúa y deja de seguirle incluso en las redes sociales.

Se trata de dos minutos de rivalidad artificial y con un punto de humor, en los que Messi y Suárez hacen a la perfección el papel de rivales aunque con un mismo punto en común: el hecho de beber 'Gatorade', la bebida energética en cuestión, para mantenerse a tono antes de los entrenamientos y los partidos que juegan con el FC Barcelona y sus respectivas selecciones.

El anuncio de 'Gatorade' ya ha dado la vuelta al mundo en cuestión de pocas horas, y los aficionados valoran su calidad y originalidad, además del punto de humor que se da con la rivalidad entre dos de las grandes estrellas del mundo futbolístico.

Messi y Suárez, amigos dentro y fuera del campo

Y es que todo el mundo sabe lo bien que se llevan Luis Suárez y Leo Messi, dos amigos que comparten incluso días de vacaciones al juntar a sus dos familias, como sucedió este pasado verano. Viven el uno prácticamente al lado del otro en los alrededores de Barcelona, y en los entrenamientos y partidos siempre se les puede ver juntos.

Neymar Jr era en las últimas temporadas la tercera pieza de este 'tridente' de amigos, pero decidió hacer las maletas al Paris Saint-Germain. La amistad de Luis Suárez y Leo Messi, en cualquier caso, siempre fue más sólida al tener el argentino y el uruguayo más cosas en común y una vida personal más familiar y asentada que la del brasileño.