El obstáculo que frena a los grandes en el fichaje de Mauro Icardi

Hace apenas unos meses la renovación era el desenlace más esperado, pero ahora la continuidad de Mauro Icardi en el Inter de Milán está envuelta en dudas. El delantero acaba contrato en 2021 y los italianos negociaban para extender su vinculación, pero los conflictos en el vestuario han supuesto un frenazo en las conversaciones y una ruptura que muchos consideran ya imposible de reparar.

Lo que era una relación idílica se ha convertido en un tormento en un periodo muy breve de tiempo. El argentino era el capitán del equipo, el líder sobre el terreno de juego y valoraba a su club más que ningún otro, lo que hizo apartar ofertas muy tentadoras y pensar en una firma que aseguraría algunos años más en el Giuseppe Meazza.

Pero la falta de acuerdo en relación a su salario hizo explotar un jaleo que ha tenido consecuencias, y en el que todos señalan a una protagonista que podría provocar un cambio sonado en el futuro del ariete. Wanda Nara, su pareja y representante, ha jugado duro para presionar a los 'nerazurri', tanto que ha provocado una reacción airada de la entidad y el aislamiento del crack en su propia escuadra.

Mientras los directivos interistas se esforzaban en acercar posturas, la agente aireaba las penas de su representado a los cuatro vientos, algo que logicamente no gustó ni a la cúpula, ni a los compañeros, ni a los 'tifosi'. Primero se dejó querer por algunos grandes de Europa, y después, sus críticas al entenador, a los futbolistas e incluso a la política de fichajes fueron la gota que colmó el vaso.

Icardi fue desposeido del brazalete, no viajó a un compromiso de Europa League y entró 'en cuarentena', sin más vías de escape que las redes sociales y con Piero Ausilio, director deportivo del Inter, insinuando que se ha quedado solo y que el traspaso ya es una opción que empiezan a valorar en el conjunto lombardo.

Los pretendientes de Icardi ya no ven claro su fichaje

Pero a pesar de que a Icardi no le faltan pretendientes, hay serias dudas sobre su fichaje, porque nadie quiere a una representante tan incendiaria como Wanda Nara. Es obvio que cualquiera quiere lo mejor para sus jugadores, pero como el de Mino Raiola, el nombre de la argentina significa problemas. FC Barcelona, Real Madrid, Juventus, PSG, Manchester United o City, entre otros, estarían encantados de acogerle, pero no están dispuestos a jugársela a cualquier precio.