OFICIAL: La Supercopa de España, el 12 de agosto en Tánger

Finalmente, la final de la Supercopa de España tendrá lugar en Tánger a partido único el día 12 de agosto a las 22:00 de la noche, algo poco habitual ya que se trata de un torneo a doble partido. De este modo, el FC Barcelona y el Sevilla FC ya conocen la fecha, el lugar y la hora en los que tendrá lugar la disputa del primer título oficial de la temporada.

La decisión se ha hecho oficial este domingo a primera hora de la tarde por mediación de un comunicado oficial de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en el que se ha especificado que el Stade Ibn Battouta, con aforo para 45.000 espectadores, será el recinto en el que se jugará el partido.

"La Supercopa de España 2018 se disputará en el Stade Ibn Battouta de la localidad de Tánger. El torneo, que abre la competición deportiva oficial de la temporada 2018/2019 en España, enfrentará al Sevilla FC, como finalista del Campeonato de España-Copa de SM el Rey y al FC Barcelona, campeón de la última edición del Campeonato Nacional de Liga de Primera División", rezaba el comunicado, sobre el evento.

Además, el comunicado también especificaba que la fecha sería definitivamente el 12 de agosto, como ya se había comentado, y que el horario sería a las 22:00, hora peninsular: "La Supercopa, que se disputará a partido único, se jugará el domingo 12 de agosto a las 22:00 (hora peninsular española, 21:00 hora local en Tánger)".

La RFEF también argumentó la decisión sobre el recinto final con el tipo de instalaciones y con el hecho de que el Atlético de Madrid inaugurara el estadio: "El Estadio de Tánger es una de las modernas instalaciones del país vecino y cuenta con capacidad para 45.000 espectadores. Fue inaugurado en 2011 con un amistoso en el que participó el Club Atlético de Madrid".

Decisión que no gusta al Sevilla

Los múltiples compromisos del FC Barcelona y del Sevilla durante el mes de agosto no permitieron que la Supercopa de España tuviese fechas suficientes como para disputarse a doble partido -con el partido de ida en casa del vencedor de Copa del Rey y el de vuelta en el del campeón de Liga- por lo que finalmente se apostó por el partido único. Una decisión que no gustó nada al club hispalense y que generó tensión.