Las opciones de Denis Suárez para seguir en el FC Barcelona

Ha comentado a lo largo de la temporada que le molestan los rumores que siempre le situan como uno de los candidatos a marcharse, pero lo cierto es que Denis Suárez no ha vivido un gran año en el FC Barcelona. El gallego esperaba tener más oportunidades con la llegada de Ernesto Valverde, pero no ha sido así y su nombre vuelve a barajarse entre las bajas para el verano.

Él, mientras tanto, insiste: "Estoy muy tranquilo, el año que viene estaré aquí seguro. Me quedan dos años de contrato. Saldrán rumores pero no me cansaré de decir que quiero triunfar en el Barça". A pesar de su mala racha, el próximo curso podría ser decisivo, y si aguanta en el vestuario le llegará su último tren. Esta vez debe subirse.

La salida de Iniesta, clave para Denis

Aunque comparaciones de tal calibre no benefician a nadie, en la plantilla han llegado a elogiar al ex del Manchester City apuntando que es el más parecido a Andrés Iniesta. Con la marcha del capitán se abre un hueco importante en el once, no sólo en cuanto al puesto sino en lo relativo a capacidad de mando, creación y magia, un papel en el que de momento le ha adelantado Philippe Coutinho.

El brasileño aterrizó en el Camp Nou y demostró todo lo que el de Salceda de Caselas no ha podido alcanzar. Es rápido de pensamiento y ejecución, preciso, valiente a la hora de encarar y combina a la perfección con el resto de sus compañeros, con una personalidad que a otros les ha faltado.

Porque todo el mundo aprecia las cualidades de Denis, pero a la hora de la verdad ha sido difícil verlas sobre el césped. El centrocampista tiene ejemplos claros dentro de la plantilla, con la paciencia de Sergi Roberto como camino a seguir o el pánico escénico que acabó 'comiéndose' a Gerard Deulofeu a esquivar, ya que volvió en su versión más sacrificada pero perdió esa chispa que le hacía distinto.

La reacción de Denis debe llegar antes que los fichajes

En este sentido, si Denis Suárez quiere triunfar como azulgrana, tiene una gran oportunidad antes de que llegue el próximo creador, un Arthur cuya incorporación se pospondrá hasta enero de 2019. Hasta entonces, y contando que no haya más incorporaciones, será uno de los pocos del vestuario que se mantenga con ese perfil tan exclusivo, el de director creativo, uno que si logra cuajar acaba valiendo millones.

El primer tramo del curso 2018-19 servirá para valorar si es apto o no para el Camp Nou, y será el momento justo para dar un paso adelante. Si esta vez funciona puede ser un descubrimiento prometedor, pero si se cae de nuevo de los planes de Ernesto Valverde, podría no haber marcha atrás. El futuro, como suele decirse, está en sus manos.