Paulinho visita el entrenamiento del Barça y reparte palabras de cariño

Paulinho vivió una breve etapa en el FC Barcelona, pero a pesar de ser corta, está claro que fue intensa. El de Sao Paulo llegó de China como un fichaje que pocos entendieron, pero se esforzó en guardar silencio y demostrar su valía sobre el césped. Su carácter y su entrega le convirtieron en un jugador muy querido por los compañeros y la afición, y tras un retorno sorprendente al Guangzhou, ahora está de vuelta.

El centrocampista ha aprovechado el parón de selecciones para hacer una visita a la Ciudad Condal, y se ha pasado por el entrenamiento del primer equipo. Las sonrisas se han multiplicado cuando han visto aparecer al brasileño, que primero ha acudido a saludar a los futbolistas que se ejercitaban en el gimnasio y después ha bajado al terreno de juego, donde el resto, junto a algunos jóvenes, completaba la sesión matinal.

Poco después, ha respondido a algunas preguntas para los medios oficiales del club, en los que ha subrayado su ilusión por estar de nuevo en la Ciudad Deportiva: "Estoy muy contento por volver a ver los ex compañeros y el staff, nos apreciamos mucho con la gente del club. En el tiempo que jugué aquí ganamos la Liga y la Copa, pero me quedo con el cariño que nos tenemos".

Además, también ha tenido buenas palabras para sus compatriotas, que de nuevo forman una colonia importante en el vestuario. En su única campaña como azulgrana no pudo coincidir con Rafinha Alcántara, pero sí convivió con un Philippe Coutinho al que ahora han 'reforzado' dos jóvenes promesas, Arthur y Malcom.

"A Coutinho lo conozco muy bien de Brasil y del Barça, Arthur seguro que lo hará muy bien en el Barça por calidad y filosofía de juego, mientras que Malcom es un jugador joven con un futuro brillante", ha detallado, dejando caer que sobre el carioca poco más hay que decir, ya que su rendimiento en los terrenos de juego habla por sí mismo.

El Guangzhou ya ha comunicado al Barça que comprará a Paulinho

El retorno de Paulinho a Barcelona se ha producido pocos días después de que el Guangzhou comunicara por escrito al club que ejercerá su opción de compra. El crack se marchó cedido para evitar problemas con la exigente normativa de traspasos de las competiciones orientales, pero finalmente todo ha avanzado según lo previsto y se abonarán 50 millones de euros para formalizar el cambio de propiedad de sus derechos federativos.