Vergonzoso mensaje de Ramos tras la humillación del Clásico

Sergio Ramos llegó al Real Madrid hace más de 13 años y se convirtió en el capitán del equipo hace otros tantos. Sin embargo, escuchándole, parece que hay veces que se le olvida lo que significas vestir esa camiseta y lucir este escudo. Después de que el equipo blanco cayese humillado en el Camp Nou -con un partido horrible del andaluz- encima se puso exigente con el nuevo entrenador.

Lo lógico, después de una humillación histórica como la del domingo, es que un jugador agache la cabeza y pida disculpas a su afición, respetando las decisiones que el club tome al respecto de un cambio en el banquillo. Algo así hizo Casemiro, que reconoció que los jugadores no habían estado a la altura.

Luego salió a hablar Sergio Ramos que, recordemos, como capitán es el máximo representante de la plantilla blanca, y tuvo una actitud muy chocante. En primer lugar, le reprochó a Casemiro sus palabras, algo que es alucinante después del baño que el Barcelona le dio a los blancos y de que el brasileño expresara lo que sentía todo el madridismo.

Pero el central andaluz no se quedó aquí y quiso dar otra lección de soberbia que llegó cuando le preguntaron por la posible llegada de un entrenador de mano dura como Antonio Conte. Lejos de agachar la cabeza y aceptar que eso pueda ocurrir, todavía tuvo la desfachatez de mandarle un 'mensajito' al posible nuevo técnico y al club.

"El respeto se gana, no se impone", dijo. Y se quedó tan ancho. Después de sus clamorosos errores en las últimas jornadas y todavía exigió. Cómo no, después recordó sus logros del pasado para 'avisar' al club: "Ahí están los entrenadores con los que hemos ganado títulos. La gestión de vestuario es más importante que el conocimiento de un entrenador". Por el tono, parecía que los cinco goles los había marcado él.

¿Este es el capitán del Real Madrid?

Lo de Sergio Ramos últimamente es digno de estudio. Sus declaraciones tras la derrota del Camp Nou se añaden a la larga lista de salidas de tono del central andaluz. Hace apenas unos días, le pegó dos balonazos a Reguilón en un entreno por un golpe accidental previo. Con un equipo sin alma y un capitán así, lo raro es que haya algún entrenador que quiera asumir los mandos.