El Valencia hizo el 0-2 tras un dudoso penalti de Sergi Roberto

El Valencia demostró desde el primer momento del partido que disputaba en el Camp Nou que no estaba dispuesto a ponerle las cosas fáciles al FC Barcelona. Si Kevin Gameiro había puesto la primera piedra en el tropiezo culé, a la media hora de juego fue Dani Parejo, de penalti, el que puso el 2-0 en el minuto 32.

El penalti fue dudoso y tuvo lugar cuando dos de los 22 futbolistas del partido -Gerard Piqué y Gabriel Paulista- estaban fuera del terreno de juego siendo atendidos. Se originó en una jugada por la banda izquierda, con un centro al área en el que Daniel Wass cayó al intentar rematar justo cuando Sergi Roberto estaba detrás suyo.

Las imágenes no dejan claro si se trata de un derribo o si el centrocampista danés se cayó solo. En todo caso, el árbitro no dudó y señaló la pena máxima, que parejo ejecutó con plena confianza tirando al palo derecho de Marc-André ter Stegen, que no pudo llegar al potente y colocado disparo del capitán valencianista.

De este modo, igual que había pasado en el primer gol de Gameiro, la polémica existió. El tanto del francés se originó en un contragolpe del Valencia posterior a una clarísima falta de Parejo sobre Leo Messi. En el gol de Wass hay serias dudas sobre si realmente el contacto con Sergi Roberto fue suficiente como para señalar penalti.

Los lloros en Madrid logran su efecto

Parece que en Madrid ya lo han conseguido. La caverna mediática lleva semanas clamando contra el VAR porque, según ellos, favorece al FC Barcelona. La campaña anticulé y los lloros han sido abundantes, cansinos y excesivos, pero finalmente parece que el victimismo merengue instaurado desde la época de Pep Guardiola está empezando a hacer su efecto.

El plumero se vio demasiado en el Barça-Valencia, y lo peor de todo es que el próximo miércoles hay un clásico de Copa del Rey. La campaña de los lloros, ¿puede también decantar la Copa del Rey? Sea como sea, miedo empiezan a dar las rarezas vistas este sábado.