Salvo a una inesperada excepción, el partido entre el Bayern Múnich y FC Barcelona de la última jornada de la fase de grupos de la Champions League 2021-22 se jugará en el Allianz Arena a puertas cerradas. El partido se jugará el próximo 12 de diciembre, a partir de las 21:00 horas, pero las nuevas restricciones del gobierno alemán para evitar más contagios por Covid-19 'obligarán' a los muniqueses y azulgrana a disputar el partido sin público. 

Los casos positivos de las últimas semanas han provocado que las medidas de sean más estrictas y que 'no se salve' nadie. Ha sido muy comentado los casos de Kimmich o distintos jugadores del Bayern Múnich, que no están vacunados y que no han podido quedarse en la concentración del equipo, y ahora las medidas afectan directamente a la presencia de público en las gradas, que se verá reducido nuevamente. 

El gobierno ha decretado recientemente un aforo del máximo 25% en los estadios y un toque de queda desde las 22:00 horas. Para los partidos de la Bundesliga no hay ningún problema, porque se jugan todos durante las tardes, pero en la Champions League sí que los hay. Los aficionados no podrán asistir al Allianz Arena para presenciar el decisivo choque (para el Barça) de la fase de grupos. 

Para el equipo dirigido por Xavi Hernández es un partido clave, dependiendo de lo que pase ante el Benfica el próximo martes. El Barça está obligado a ganar al cuadro portugués, porque si no tendría que puntuar ante el Bayern y eso es una tarea muy complicada, recordando que en el partido de ida los de de Julian Nagelsmann golearon a los culés con un 0-3 que pudo ser mucho peor para el equipo culé. Robert Lewandowski, por partida doble, y Thomas Müller definieron el enfrentamiento.

El Barça saldría 'ganando' con esta medida

No es un secreto para nadie que los aficionados desde las gradas son el 'jugador 12' de cada equipo y que el Allianz Arena es un estadio duro de visitar, más si está repleto. El Barça tiene una bala a favor y habrá que ver si pueden aprovecharla para puntuar en Múnich y cerrar su clasificación a los octavos de final de la Champions League de manera tranquila. Será un reto, en cualquier caso, pero no imposible.