El partido entre el FC Barcelona y el Bayern Múnich dejó diferentes sensaciones para el conjunto azulgrana. Los de Xavi Hernández volvieron a caer ante el gigante bávaro por segunda vez en la temporada sin rematar una sola vez al arco de Sven Ulreich, lo que expone la falta de contundencia del club en escenarios importantes a pesar de llegar matemáticamente eliminados.

Sin embargo, también dejó una chispa de calidad dentro de la plantilla y no es otro que Alejandro Balde. El canterano fue el único que estuvo a la altura del compromiso por la banda izquierda, atacando con firmeza de cara a la meta rival y mostrándose sólido por el costado frente a Serge Gnabry, uno de los futbolistas más importantes del equipo de Julen Nagelsmann.

A sus 19 años está teniendo un crecimiento exponencial como lateral izquierdo y está comenzando a ganarse la titularidad absoluta en todas las competiciones que le restan por disputar al Barça. De hecho, uno de los errores más notorios de Xavi Hernández fue dejarle en el banquillo en los dos partidos frente al Inter de Milan y en la ida del Allianz Arena ante los teutones.

También en la goleada (5-1) frente al Viktoria Plzen se quedó en el ostracismo, siendo Jordi Alba el que ocuparía su rol dentro de la zaga. Su poca participación en Champions pudo ser uno de los tantos motivos que perjudicaron al Barcelona en defensa, más allá de los errores de Gerard Piqué y Sergio Busquets que terminaron de sentenciar la continuidad en Liga de Campeones.

Titular indiscutible

Si bien a Balde todavía le resta mucho por mejorar, lo cierto es que hoy en día mantiene un 'performance' superior a los demás futbolistas del plantel en su posición. Marcos Alonso está perfilándose como central ante las lesiones que han perjudicado al vestuario, mientras que Jordi Alba es una opción de recambio para partidos de menos importancia, tanto en Liga como en Copa del Rey.