Han pasado casi ocho meses desde que el París Saint-Germain confirmó el fichaje de Ousmane Dembélé, procedente del FC Barcelona, tras abonar los 50,4 millones de euros de la cláusula de salida quee tenía en su contrato con la entidad azulgrana. Fue uno de los movimientos más 'sorpresivos' del mercado de fichajes de 2023, porque el francés parecía 'feliz' en la Ciudad Condal y meses antes había asegurado que su sueño era ganar la Champions League con el club. 

Siete meses y 27 días después, Dembélé y el Barça volverán a verse las caras. En una situación muy diferente, porque serán rivales, y con una 'espina' clavada por las formas. Hay que remontarse hasta el Clásico, contra el Real Madrid en Dallas, para 'recordar' la historia. Fue el encargado de abrir el marcador en el que fue su último partido con la camiseta azulgrana. En medio de la gira, con el partido contra el AC Milan, comenzaron los rumores de una negociación del entorno del jugador con el conjunto parisino que pretendían cerrar antes del 1 de agosto. 

El adiós más 'incómodo' para el Barça en 2023

Y es que, mientras desde el Barça negaban cualquier tipo de movimiento, Moussa Sissoko y compañía juntaban las piezas del 'puzzle' para dar forma a un traspaso en el que él, como agente, y el futbolista se veían beneficiados económicamente. Completando el fichaje en esa fecha, se aseguraban un porcentaje de los 50,4 'kilos' que iba a abonar el PSG a los catalanes producto de una cláusula que  habían incluido en la renovación de contrato que habían sellado un año antes. El plan les salió de maravillas, a pesar de que el acuerdo se anunció el 12 de agosto, y acabaron ganando 15 millones. 

Para Xavi Hernández, quien consideraba al 'Mosquito' como un intocable y uno de sus jugadores más importantes, fue un completo 'shock'. Nadie en el club se esperaba que Dembélé decidiera marcharse de esa forma. "Estoy decepcionado. No podíamos competir con la propuesta del PSG. Intenté salvarlo, pero me dijo que ya había hablado con Luis Enrique y no había marcha atrás", decía en ese momento el entrenador egarense. 

La vida ha cambiado mucho para Dembélé y el Barça

Lo cierto es que vuelven a verse las caras y la vida, para ambas partes, ha cambiado demasiado desde que se vieron por última vez en la gira por Estados Unidos. El Barça encontró en Lamine Yamal su recurso fijo para el extremo diestro y Dembélé alcanzó la regularidad en Francia, donde se ha olvidado de las lesiones y problemas físicos, que fue su talón de Aquiles en su etapa en la Ciudad Condal. No les ha ido mal, pero sí que es un reencuentro incómodo.