Si Eden Hazard fue una pesadilla durante los primeros minutos con sus rápidas y técnicas incursiones por la banda izquierda y por el centro del ataque 'blue', Willian fue el protagonista en los últimos minutos de la ida de octavos de final de la Champions League frente al FC Barcelona, al efectuar dos auténticos 'latigazos' desde fuera del área que por muy poco no acabaron en gol.

Y es que los dos palos verticales de la portería de Ter Stegen, primero el derecho y luego el izquierdo, protegieron al conjunto culé repeliendo ambos trallazos y provocando el desconsuelo de Willian, que miró al cielo y protestó por su mala suerte.

El FC Barcelona realizó demasiadas concesiones defensivas en el primer tiempo de este martes en Stamford Bridge, y el Chelsea lo aprovechó gracias a sus rápidos delanteros, capaces de regatear y también de disparar con gran acierto desde fuera del área.

La fortuna jugó del lado del FC Barcelona

Esta vez, en cualquier caso, la fortuna hizo que el Barcelona no recibiese ningún gol de Willian en la primera mitad, y tampoco de un Hazard que con un remate peligroso de volea se acercó también al travesaño de la portería de Ter Stegen.

Minutos de sufrimiento para el FC Barcelona, en definitiva, a la espera de una respuesta en la segunda mitad tras las instrucciones técnicas de Ernesto Valverde. Si el FC Barcelona no recibió ningún gol en la primera mitad frente al Chelsea en Stamford Bridge, este martes, fue únicamente gracias a la buena suerte y a la falta de precisión de los jugadores 'blues'. Habrá que tomar nota.