El FC Barcelona ha demostrado a lo largo de la presente temporada estar realmente sublime en todas las facetas del juego, incluso también en las jugadas a balón parado, a excepción de una: los lanzamientos de penalti. Leo Messi, Neymar Jr y Luis Suárez se han repartido entre los tres nueve penaltis errados en lo que va de campaña 2015-16, una estadística disimulada por la enorme capacidad goleadora de los de Luis Enrique -tienen una media de tres goles por encuentro-, pero que no deja de ser preocupante de cara a fechas futuras.
Y es que en UEFA Champions League, sin ir más lejos, el Atlético de Madrid tuvo que vivir una agónica tanda de penaltis este pasado martes para pasar de ronda contra el PSV Eindhoven, y la superó anotando ocho penas máximas sin errar ni una sola, demostrando fortaleza mental en momentos de máxima tensión y una sangre fría de la que tendrá que hacer gala el Barça en el caso de llegar a una hipotética tanda de penales contra los colchoneros en la competición europea.
Partiendo de la base de que parece improbable que los cuartos de final entre Barça y Atlético se tengan que resolver así el próximo 13 de abril -cuando se disputará el partido de vuelta en el Vicente Calderón- es también muy probable que Neymar, Messi y Suárez, actualmente los tres mejores jugadores del mundo y capitanes de las tres grandes selecciones de América, no fallen en un momento crucial como sería una tanda de penaltis a vida o muerte. Están acostumbrados a la presión, y son los mejores delanteros del planeta precisamente porque han superado a lo largo de sus respectivas carreras futbolísticas muchas situaciones de este tipo.
Los penaltis fallados en partidos puntuales esta temporada se han producido, en la mayoría de los casos, cuando el Barça ya estaba por delante de su rival en el marcador, con una presión menor y, por lo tanto, también menos exigencia y concentración en el lanzamiento. Cuando la mentalidad ganadora tenga que aflorar en sus mentes, sin embargo, seguro que los miembros de la "MSN" no fallarán. Eso sí, una hipotética tanda de penaltis en cuartos de final significaría que a los del "Cholo" Simeone les ha ido muy bien en la eliminatoria. Porque el Barça es esta temporada un rodillo, y lo más probable es que, si sigue al ritmo ganador actual, consiga resolver el cruce a lo largo de los 180 minutos reglamentarios.