Nueva polémica en torno al Real Madrid y a los árbitros que le benefician en la UEFA Champions League. En esta ocasión bien le ha valido para la clasificación para las semifinales de la competición una "ayudita" de los hombres de negro tras conceder una falta que no había sido en la frontal del área del Wolfsburgo. Y ésta, como todo el mundo sabe, llevó al posterior gol de Cristiano Ronaldo.

Eso es así y es algo que toda la prensa de la caverna ha silenciado. El colegiado del encuentro Viktor Kassai, quizás llevado por la presión del Bernabéu o por otras más oscuras, concedió una peligrosísima falta al borde del área en un supuesto derribo de Luiz Gustavo sobre Luka Modric que nunca se produjo, pues el croata se dejó caer descaradamente.

Analizando la jugada con calma, se puede ver como el mediocentro brasileño llega primero al balón y se lo arrebata al centrocampista balcánico. Modric, sin balón y sin que le toque el rival, se tira descaradamente para hacer "picar" al colegiado del encuentro.

Y gracias a esa falta, y a una barrera que se abrió justo por donde no debía, Cristiano Ronaldo puso el tercero en el luminoso que dio la clasificación a los blancos. Un gol que permitió a los de la capital eliminar finalmente al octavo de la Bundesliga y poder volver a las semifinales de la competición continental.