El fútbol es muy injusto a veces, y eso lo sabe bien el FC Barcelona. Al inicio de la segunda mitad contra el Tottenham, y tras dos disparos al palo de Lionel Messi, Harry Kane aprovechó un contragolpe para hacer gala de sus maravillosos movimientos ofensivos, dejar por los suelos a la defensa del Barça y definir a la perfección para batir a Ter Stegen.

El FC Barcelona había jugado a la perfección hasta entonces, y de hecho Leo Messi había enviado dos disparos al palo justo antes de que llegara el gol de Harry Kane, lo que ya dice mucho del buen estado de forma del juego ofensivo del conjunto culé.

Harry Kane, sin embargo, echó al traste las dos oportunidades claras del Barcelona y, con su gol frente al FC Barcelona, siguió manteniendo en tensión a los jugadores culés. La diana llegó en un contragolpe que el Barça no llegó a tiempo de frenar.

Y es que el prodigioso delantero británico, que el año pasado arrebató a Leo Messi el honor de ser el máximo goleador del año 2017 con 56 goles oficiales, es un auténtico especialista en este tipo de jugadas, y la defensa azulgrana no consiguió frenarle.

Harry Kane no pudo destacar en Wembley

Fue una de las pocas ocasiones, sin embargo, en las que Harry Kane destacó. Porque, a lo largo del resto del partido, la defensa azulgrana pudo atarle en corto y estar siempre pendiente de sus movimientos. El Tottenham tan sólo inquietó al FC Barcelona a base de contragolpes, pero puede decirse que durante la mayor parte de la cita fue el Barça el que dominó.

Harry Kane, en esta coyuntura, no lució sus máximas cualidades en Wembley, aunque sí dejó un gran gol que no sirvió de nada, eso sí, para un Tottenham que se mantiene con cero puntos al fondo de la clasificación del grupo del FC Barcelona, con los de Ernesto Valverde como líderes y, en segunda posición, un Inter de Milán que también tiene 6 puntos.