La plantilla del FC Barcelona y sus aficionados estarán más pendientes que nunca del Inter de Milan. Los italianos deben ganar este miércoles ante el Viktoria Plzen a las 18.45 h para sellar su pase a octavos, y además enviar al Barça a la Europa League. Con los de Inzaghi siendo locales, el milagro parece casi imposible después de haber ganado en tierras checas (0-2) en septiembre, aunque al equipo lombardo le persigue una 'maldición' en las últimas jornadas de la Champions League cuando se juega el pase en casa.
Todo comenzó en 2018, cuando el Inter regresó al torneo después de seis años de ausencia compartiendo grupo con el Barça, el Tottenham y el PSV Eindhoven. Un grupo exigente donde los de Milán llegaron a la última jornada dependiendo de sí mismos. Empatado a puntos con el Tottenham en la segunda plaza, debía ganar en casa contra el PSV, que ya estaba eliminado con solo un punto. El Barça, hizo su trabajo y empató ante los londinenses (1-1), pero el equipo de Luciano Spalletti en aquel momento no pasó del 1-1 en el Giuseppe Meazza.
Idéntico escenario para la siguiente edición. El Barça era ya campeón de grupo y llegaba a Milán sin demasiado en juego. El Inter tenía la ventaja de los goles a favor con el Borussia Dortmund, que sumaba los mismos puntos (7). Por tanto, le bastaba con hacer el mismo resultado que los alemanes en casa ante el modesto Slavia Praga. El Borussia ganó (2-1) pero el Inter, esta vez con Antonio Conte en el banquillo, no pudo ganar.
Romelu Lukaku empató en el 44’ el gol inicial de Carles Pérez y los interistas tenían todo el segundo tiempo para convertir otro gol y sellar el pase a octavos, algo que no terminó sucediendo. El Inter no pudo derrotar a un Barça con Neto, Todibo, Wague, Umtiti y Aleñá en el once e incluso terminó perdiendo el partido gracias al tanto de Ansu Fati en los minutos finales. Gol que además lo convirtió en el goleador más joven de la historia de la Champions.
Tres años, tres decepciones
Para sumar mas antecedentes a la 'maldición, el Inter escribió otro capítulo en la Champions 2020-21. El equipo, con Conte en el banquillo nuevamente, compartió sector con el Real Madrid, el Borussia Mönchengladbach y el Shakhtar y llegó último antes de la última jornada con cinco puntos, superado por los blancos (7), los ucranianos (7) y los germanos (8).
El Inter había hecho lo más difícil en la anterior jornada al ganar al Gladbach (2-3) y quedarse con la ventaja del ‘goal-average’ particular. Debía esperar que el Madrid ganara al Borussia, como hizo (2-0), y derrotar en el Giuseppe Meazza al Shakhtar, pero la historia volvió a repetirse. Lukaku y Lautaro, en gran nivel en aquella temporada, no vieron puerta y el 0-0 condenó a los italianos a terminar su campaña en Europa en diciembre.