El Paris Saint-Germain y el FC Barcelona mantienen una rivalidad importante desde hace algunos años. Los parisinos y los culés se han enfrentado un total de 9 veces en Champions League desde el año 2013, incluyendo la ida de los octavos de final de esta campaña. Un partido en el que los franceses pasaron por encima del Barça con un contundente 1-4 que deja a los azulgrana contra las cuerdas.

El encuentro entre los barcelonistas y los galos de este pasado martes dejó a los de la capital de Francia con un gran sabor de boca, aunque el duelo no empezara todo lo bien que hubieran soñado. El árbitro señaló penalti por un derribo involuntario de Kurzawa sobre Frenkie de Jong y eso desató la ira del presidente del PSG, que según 'Mundo Deportivo' no tuvo un comportamiento a la altura de su cargo.

En el mencionado medio catalán aseguran que el máximo mandatario del conjunto parisino perdió los papeles cuando Björn Kuipers pitó la pena máxima. Lo cierto es que en un primer momento pareció que De Jong podía haberse tropezado solo, pero hay una toma en la que se ve clarísimo que el lateral del PSG atropelló al neerlandés e hizo que se fuea al suelo, por lo que la jugada no tuvo discusión.

A pesar de todo, Nasser Al-Khelaïfi aplaudió de forma irónica al ver la señalización mientras miraba a Carles Tusquets, presidente de la Comisión Gestora azulgrana. A continuación, el qatarí se giró para mirar a Giorgio Marchetti, adjunto al secretario general de la UEFA, que estaba al lado de Theodore Theodoridis, secretario general del organismo. Entonces, soltó un "¡Giorgio, al Barça!" que todos los representantes del Barcelona y de la UEFA pudieron escuchar.

Una vez ocurrido todo esto, el máximo responsable del conjunto parisino no quiso ver la transformación del penalti y se levantó para subir las escaleras y tranquilizarse. El presidente del PSG no vio en directo la diana de Leo Messi y regresó poco más tarde a su localidad para seguir viendo el encuentro. Una actitud más que reprobable que deja claro que a Al-Khelaïfi no le cae nada bien el Barça.

Al-Khelaïfi no fue el peor del PSG en el palco

Pero el comportamiento del presidente del Paris Saint-Germain no fue nada comparado con el de otros representantes de su club. Según parece, el rapero DJ Snake, amigo de Kylian Mbappé y de Neymar Jr, asistió al duelo y celebró con demasiados ánimos los goles de los franceses junto a otros representantes parisinos. Mientras, Tusquets y Òscar Grau, CEO del club barcelonista, tuvieron que ver atónitos ese espectáculo.