Cuando se habla del gran peligro del Liverpool se habla de su tridente de ataque. La tripleta que forman Salah, Firmino y Mané es una de las mejores del mundo y es la que más goles ha marcado este curso en Europa. Mo Salah es la gran estrella de los tres y es el máximo goleador de la Premier League, pero el africano no es el único peligro 'red'.
Por alabar al ex de la Roma muchas veces se tiende a infravalorar a Sadio Mané. El extremo izquierdo lleva dos temporadas extraordinarias y este curso incluso ha sido la gran figuara de los de Jürgen Klopp durante los dos primeros tercios de campaña. El senegalés lleva 24 goles entre todas las competiciones y se ha destapado como un goleador a tener muy en cuenta.
En Champions League solo ha marcado 4 tantos en diez encuentros, pero como peculiaridad, 3 de ellos los ha anotado lejos de Anfield. El ex del Sothampton es una amenaza tremenda para el Barcelona, que deberá estar muy atento a sus incursiones por la banda. Parece que será Sergi Roberto el encargado de frenarle, pero el de Reus necesitará ayudas con este potentísimo jugador.
Es uno de los más rápidos de Europa con y sin balón y sus arrancadas son casi imparables. A la contra puede hacer muchísimo daño a los barcelonistas, que tendrán que evitar pérdidas tontas por cualquiera de los dos costados. Salah no es tan potente como Mané, pero también es muy rápido y técnicamente es superior.
Firmino, el ancla entre los dos velocistas
Roberto Firmino, si logra recuperarse para la ida de Champions League, ejercerá de ancla entre los dos potentes futbolistas que juegan en banda. El brasileño aporta la pausa y pone mucha calidad en el tridente ofensivo de los de Klopp. No tiene tanto gol como sus dos compañeros y esta campaña está bastante fallón de cara a puerta, pero está acabando el año muy bien y ha mejorado mucho su rendimiento últimamente.
Los tres forman un tridente de lujo en el que cada uno aporta cosas distintas. Mané es la potencia y la velocidad en su máxima expresión, Salah es la mezcla perfecta entre velocidad y calidad, y Firmino es el '9' con alma de '10'. El Barça tendrá que tener muy controlados a los tres si quiere ganar en el Camp Nou y sacar un buen resultado de Anfield.