El sorteo de los cruces de los octavos de final de la UEFA Champions League dejó una estelada de partidos interesantes. Uno de ellos cruzará al FC Barcelona y al Napoli, un enfrentamiento históricamente dominado por el club azulgrana y que tendrá su quinto episodio el 21 de febrero y el sexto el 12 de marzo.

En este tipo de partidos entre escuadras de gran nivel, cada detalle, por pequeño que sea, puede ser indispensable para decantar la balanza a favor de un lado u otro. En ese sentido, el combinado ‘Partenopeo’ recibió una muy buena noticia al conocer la fecha en la que se disputará el primer ‘combate’ en esta serie, el cual está estipulado para desarrollarse en el Estadio Diego Armando Maradona.

La distribución del calendario por parte de la UEFA 'beneficiará' al Napoli

Tal y como señala 'SPORT', por motivos de intereses televisivos, el atractivo enfrentamiento entre napolitanos y culés quedó agendado en la última jornada posible para jugar esta ronda. Esto representa un beneficio indirecto para la escuadra italiana, ya que están obligados a ceder a dos de sus jugadores clave a la Copa Africana de Naciones, la cual se desarrollará entre el 13 de enero y el 11 de febrero en Costa de Marfil.

En ese sentido, el Napoli tendría que prestar a su goleador estrella, Victor Osimhen (Nigeria), y a uno de sus centrocampistas estelares, Frank Zambo Anguissa (Camerún), a sus respectivas selecciones en la magna cita del continente africano. Estas dos piezas forman parte de conjuntos que parten como candidatos a hacerse del trofeo o, en su defecto, trascender hasta las fases altas del torneo.

Bajo esa premisa, el hecho de que a los 'Partenopeos' le haya tocado disputar la segunda fecha en esta primera fase de los octavos de la Champions le ha caído como 'anillo al dedo'. Esto se debe a que si le hubiera correspondido en la primera fecha (13/14 de febrero), aunque para esa fecha la Copa Africana de Naciones ya habría terminado, tanto Osimhen como Anguissa, en el caso hipotético de que ambos o al menos uno de ellos dispute la final, llegarían con muy poco tiempo para reincorporarse a la dinámica napolitana y con muy poco tiempo de descanso. Por ende, el hecho de que el duelo ante el Barcelona se dispute lo más tarde posible ha representado un alivio para los italianos, que, si nada cambia en el camino, llegará al duelo ante los azulgranas con todas sus piezas frescas.