En un partido parejo y emocionante, Real Madrid y Manchester City igualaron en la ida de las 'semis' de la UEFA Champions League disputada en el Santiago Bernabéu. Vinicius Jr. y Kevin De Bruyne marcaron dos golazos desde fuera del área en un choque muy intenso que se saldó con hasta once infracciones en ambos equipos y dos jugadores amonestados por bando. Al final, hubo varias polémicas sobre la lupa del colegiado Artur Dias.
Y es que el portugués dejó pasar varias faltas duras en la primera parte del lado del Madrid que desquiciaron a Pep Guardiola. En el complemento fue Carlo Ancelotti quien se quejó del principal tras la jugada del gol del empate de De Bruyne por un lateral no concedido. Al final, el empate dejó más conformes a los visitantes, más allá de alguna roja no mostrada al conjunto 'merengue'.
Rüdiger, Carvajal y Kroos rozaron la expulsión
En la primera parte, el Madrid bien pudo marcharse al vestuario con un jugador menos. En el comienzo del partido, Dias dejó pasar un codazo de Antonio Rüdiger a İlkay Gündogan que ni siquiera fue sancionado con infracción. El árbitro se vio obligado a detener el compromiso ante las quejas de Kyle Walker, ya que Gündogan permaneció tirado boca abajo por varios segundos sobre el césped del Bernabéu.
El mismo mediocentro recibiría una dura infracción de su otro compatriota en el equipo contrario, Toni Kroos, antes del descanso. Esta vez, el luso no tuvo más remedio que amonestar al jugador del Madrid por una patada casi al nivel de la cintura que bien pudo merecer la roja. Previamente, Dani Carvajal empujó a Jack Grealish sobre la línea de fondo, haciéndole chocar contra la publicidad electrónica. El extremo inglés reaccionó con un manotazo y el lateral fingió un golpe, arrojándose al verde, pero el colegiado dejó pasar la acción sin amonestar a nadie, incluso cuando, segundos más tarde, los jugadores volvieron a encararse.
Los 'lloros' del Madrid en el gol de De Bruyne
En el complemento, Carlo Ancelotti fue amonestado tras protestar airadamente el gol de Kevin De Bruyne, pidiendo revisar un lateral previo no concedido a los locales. Bernardo Silva salvó el balón en el costado antes del error de Camavinga que derivó en el golazo del belga. Dio la impresión de que el balón había salido todo en el contacto con Bernardo, pero la participación del galo en la jugada hizo que el VAR, acertadamente, no interviniera para revisar el posible lateral, ya que se trataba de una acción anterior y la posesión había cambiado.