El FC Barcelona hizo los deberes en LaLiga a su vuelta del parón de selecciones, y ahora tiene el punto de mira puesto en la Champions. Los catalanes se alzaron en el liderato del campeonato de la regularidad por primera vez en esta temporada, y pretenden acercarse a la fase eliminatoria de la competición europea sumando una victoria en el Grupo F, en el que se enfrentan al adversario teóricamente más débil.
El Slavia de Praga también ganó en liga antes de medirse a los azulgrana, e hizo algunas rotaciones en su duelo contra el Pribram. Los laterales Vladimir Coufal y Jan Boril, el central David Hovorka o los delanteros Stanislav Tecl, Nicolae Stanciu y Peter Olayinka arrancaron el compromiso en el banquillo, aunque el técnico Hindrich Trpisovsky tuvo que recurrir a algunos de ellos para asegurar los tres puntos.
El sólido líder del campeonato checo se enfrentaba al antepenúltimo clasificado, y tuvo que remontar para certificar un triunfo. Después de media hora resistiendo a la batalla, los visitantes amenazaron con conquistar el Sinobo Stadium, ya que Michal Skoda aprovechó un rechace del guardameta tras un duro disparo de Martin Novy y colocó un inquietante 0-1 en el marcador.
A los locales les costaba reaccionar y el cronómetro iba avanzando, pero diez minutos de inspiración bastaron para resolver sus problemas. En el terreno de juego aparecieron Stanciu y Tecl y revolucionaron el duelo, lo que sirvió para voltear el electrónico. En el minuto 63 Tomas Soucek establecía el empate de penalti, poco después el rumano amarraba la ventaja forzando un gol en propia de Kodr y Soucek repetía para un definitivo 3-1.
El Barça está advertido del peligro del Slavia
A pesar de que el Barça es claro favorito en su cita en la Champions, está advertido del peligro del Slavia, que ya le puso las cosas difíciles a los otros aspirantes de su grupo. El Inter de Milán sólo pudo alcanzar una igualada en el descuento en la primera jornada en el Giuseppe Meazza, y en la República Checa, el Borussia Dortmund tuvo que sudar para sellar un 0-2 con dos contras letales de Achraf Hakimi.
Los culés visitan praga en plena lucha por el liderato del Grupo F, que de momento comparten con los alemanes. Ambos tienen cuatro puntos tras empatar en el primer encuentro del torneo y obtener una victoria en el segundo. Ahora, los hombres de Ernesto Valverde quieren aprovecha el viaje de los 'nerazzurri' al Signal Iduna Park para poner tierra de por medio y acercarse a los octavos de final.