El FC Barcelona tendría que abandonar el Camp Nou por un año cuando avancen las obras del 'Espai Barça' y desde las oficinas del club están por decidir al estadio que se 'mudarán' por un tiempo. A principios del mes de mayo, los directivos azulgrana se habían reunido con el Ayuntamiento de Barcelona para hablar sobre la obra y plantear la posibilidad de que el cuadro culé juegue en el Estadi Lluís Companys de Montjuïc.
En ese momento, el club comunicó que la idea era que "mientras se ejecute la obra, el Estadio no pierda nunca una capacidad para unos 80.000 asientos. Sin embargo, sí se ha recordado que, durante un corto periodo de tiempo, el Camp Nou no podrá acoger partidos ni espectadores, lo que obligará a la Entidad a buscar provisionalmente una nueva casa, y ésta será, muy probablemente, el Estadi Olímpic Lluís Companys".
Sin embargo, este domingo 'Mundo Deportivo' informó que ahora mismo en el seno del club hay dudas y ha crecido la opción de jugar en el Estadi Johan Cruyff de la Ciutat Esportiva por varios motivos y 'pros' que tiene evitar una 'mudanza', comenzando con que la inversión para elevar el aforo se haría en un estadio propio. Otro de los puntos claves es el estado del césped, que es híbrido, igual que el del Camp Nou.
Por otra parte, en el Johan Cruyff el Barça sería el único usuario y no tendría opciones de ser perjudicado. El Montjuïc, a diferencia, no sería exclusivo y se compaginaría con conciertos y diferentes eventos municipales, lo que influye en gran medida en la atención y el cuidado del césped.
Ventajas del estadio olímpico
Aunque según se presume, el Barça tiene más ganas de quedarse en 'casa', el Montjuïc ofrece varias ventajas al club culé, comenzando con su capacidad, para 60.173 personas, pero la pista de atletismo restaría ambiente. Por otra parte, la entidad azulgrana tendría que hace menos rotación para escoger a los abonados que apoyarán al equipo en las gradas, porque el recinto es mucho más amplio. Además, los culés no tendrán que esperar tanto si se aprueba el traslado.