FC Barcelona y Valencia lo discutirán este jueves, pero el miércoles la primera semifinal de la Copa del Rey ya ha acabado con sorpresa. A pesar del gran partido del Sevilla en Butarque, el Leganés sacó un empate gracias a su capacidad de sufrimiento y a un error de Sergio Rico, que deja todo abierto para el enfrentamiento que en una semana tendrá lugar en el Sánchez Pizjuán.

Desde la llegada de Vincenzo Montella los blanquirrojos han recuperado una alegría que parecían haber perdido, y que van amarrando poco a poco mientras esperan que se acoplen algunas de sus nuevas incorporaciones. Sin embargo, han pagado algunos errores por dejar sus encuentros sin cerrar, por falta de puntería y por un guardameta que ha perdido la brillantez que un día ofreció.

Si en la primera parte hubo acoso y derribo visitante hasta que Luis Muriel encontró las redes, en la segunda todo lo marcó la salida en falso del cancerbero, que no acertó a despejar un balón de que rebotó en la nuca de un insistente Dimitrios Siovas y acabó sellando el 1-1 definitivo. Quedaban muchos minuto por delante, pero el Leganés de Garitano equiparó las fuerzas a la par que el marcador y el electrónico no se movió más.

Semifinalistas por sorpresa

El Sevilla no puede confiarse a pesar de jugar en casa contra un Leganés que ya es el 'matagigantes' oficial de esta Copa. Aunque los andaluces se lucieron en un cruce contra el Atlético de Madrid, los 'pepineros' partían como víctimas en sus compromisos frente a Villarreal y Real Madrid, los dos favoritos a los que dejaron en el camino.