De toda victoria y goleada siempre salen buenas palabras y parece que sólo se destaca lo positivo aunque, en ocasiones, una crítica constructiva puntual pueda valer de mucho más. Esto es lo que ocurre tras el tres a cero del Barça sobre el Athletic Club de Bilbao con André Gomes. El internacional portugués es un jugador de calidad y que está llamado a marcar una era como azulgrana... Pero todavía está muy verde.
Y es que Gomes comienza a levantar algún que otro murmullo y más que alguna duda en el Camp Nou. Si bien ya ha dejado algún buen partido, también son considerables sus "empanadas" en el juego azulgrana que acaban penalizando a los de Luis Enrique.
Frente a los rojiblancos volvió a ocurrir. Sobre todo hasta el gol de Leo Messi en el 39' de partido y cuando los leones más apretaban. Una presión alta que ahogaba y asfixiaba a los culés y donde el medio luso tuvo parte de culpa pues no ofrecía ninguna salida aceptable de pelota.
André Gomes no funcionó haciendo de Busquets
Cometió varios errores en esa primera mitad y también en el segundo tiempo. Actuó de mediocentro por Sergio Busquets y posiblemente haya sido su peor partido en esa demarcación. No estuvo cómodo y volvió a demostrar que de los fichajes de esta temporada es al que más le está costando ser regular.
Todavía hay tiempo y se debe tener paciencia con él, pero muchos piensan que debe de espabilar y dar un paso al frente en su juego. Por algo Luis Enrique confía en su fútbol y le tiene mucha fe, por algo le da las riendas del equipo ante un rival tan peligroso como el vasco. Pero que se ande con ojo pues en el Camp Nou ya comienza a sembrar dudas y algún que otro murmullo, como pudo escucharse este sábado.