Es cierto que el Deportivo de la Coruña no ofreció mucha resistencia en el Camp Nou, y que al final se trataba de un enfrentamiento del líder contra el 17º clasificado, pero también lo es que los que vieron el encuentro, disfrutaron como nunca de otra exhibición de Andrés Iniesta. El manchego fue el dominador absoluto sobre el césped y canalizó como nadie el juego del FC Barcelona.

Porque si los culés echan de menos a Xavi, nadie quiere que el mago de Fuentealbilla se plantee siquiera colgar las botas. Tiene limitados los minutos, pero lo que nunca encontrará barreras será la magia que sale de sus pies. El centrocampista no es sólo un genio del pase, sino un malabarista de los que hacen que sea necesario frotarse los ojos.

Los jugadores blanquiazules intentaron cazarle durante el encuentro, pero pocos tuvieron el premio de robarle un balón con el que todo el rato quiso mandar. Asistencias, regates, controles... Era el juego del escondite, y nadie sabia donde estaba un esférico que parece ser un órgano más de su propio cuerpo.

56 minutos duró el regalo, hasta que el estadio se deshizo en aplausos para expresar su agradecimiento al capitán azulgrana. Será, sin duda, uno de los futbolistas clave en el Clásico, y si Andrés Iniesta está en el Santiago Bernabéu, el Barça será mucho más Barça.

Valverde, sin palabras

Quien también se ha rendido a la actuación de Iniesta ha ido Ernesto Valverde, que ha comentado en rueda de prensa la exhibición del veterano centrocampista. "Qué podría decir. Tengo mucha suerte de poder contar con él, con Messi, con Suárez, con Aleix. Hoy ha empezado por una posición diferente por las características del rival y porque quería que Alcácer actuara por la izquierda. Además, creo que Andrés juega bien en cualquier posición", ha apuntado.