"Siempre hablo, soy pasional, protesto, me enfado, vivo el partido... Así me ha ido bien y es difícil cambiar", aseguró Xavi Hernández tras el partido en el estadio Do Dragao, donde vio la decimoquinta tarjeta amarilla como entrenador del Barça. El egarense, cerca de cumplir dos años en el banquillo culé, y viviendo su tercer curso, se ha caracterizado por ser un entrenador que vive muy intensamente cada partido.
En la primera temporada (2021-22) fue amonestado en cinco ocasiones, cuatro ocasiones en partidos de Liga y una, en un partido de la Europa League. El motivo de las tarjetas fueron las protestas en forma de gestos de disconformidad con una decisión arbitral o por hacer observaciones al cuarto árbitro. Esa situación no cambió demasiado después de completar su primera campaña como técnico azulgrana.
Las cifras dejan claro cómo el entrenador del Barça muestra su postura
De hecho, en la segunda campaña (2022-23), Xavi superó su marca y vio ocho amarillas: cinco en Liga, dos en Copa del Rey y una en Champions League. El motivo de las amonestaciones, nuevamente, fueron las protestas al árbitro. Xavi volvió a demostrar que su forma de vivir los partidos es esa y no duda en mostrar su desacuerdo ante las acciones que cree injustas, sobre todo con un arbitraje tan polémico como el que suele existir en España.
Ya en la presente temporada 2023-24 fue expulsado en el Getafe-Barça (0-0) por protestar después de ser advertido (suspendido con dos partidos) y en Champions League, contra el Oporto, vio la tarjeta amarilla por protestar. Con 10 de esas tarjetas en el segundo tiempo de los partidos, ya parece quedar claro que los colegiados no tienen demasiada paciencia con el técnico del Barça y su manera de dejarles ver que pudieron haberse equivocado en una decisión.
El cuerpo técnico de Xavi también suele protestar
La decisión de vivir así los partidos no es exclusiva del entrenador y ha quedado demostrada cuando otros iembros del banquillo del Barça también han sido amonestados, como ha sido el caso de su asistente y hermano Òscar Hernández, que acumula dos tarjetas amarillas (Cádiz y Osasuna) y dos expulsiones (Atlético y Mallorca). Además, el delegado Carlos Naval también ha visto una amarilla (Rayo), así como el utillero Jordi Duran (Rayo) y el entrenador de porteros José Ramón De la Fuente (Sevilla y Real Madrid).