El FC Barcelona ya tiene a su ansiado lateral izquierdo. Los culés han anunciado este domingo el fichaje de Junior Firpo, ya ex carrilero zurdo del Real Betis. El jugador nacido en la República Dominicana ha costado 18 millones de euros fijos más otros 12 en variables y firmará por los próximos cinco años, hasta junio de 2024.

Los blaugranas fichan a un jugador que promete mucho y que está considerado uno de los proyectos de laterales izquierdos más interesantes del continente europeo. El internacional sub-21 español lleva solo un año siendo titular en Primera, pero en ese tiempo le ha dado tiempo de sobra a demostrar todo lo que tiene dentro.

Sin duda, el físico es lo que más destaca a primera vista en Junior. El hispano-dominicano tiene un físico privilegiado y en carrera con el balón controlado es casi imparable. Su zancada es enorme y en ataque con espacios puede ser decisivo. En el Camp Nou destrozó a Sergi Roberto en la ida de Liga de la temporada pasada e incluso marcó un gol con un potente disparo.

Sus cualidades ofensivas le hacen ser un valor muy interesante para un Barça que necesita laterales ofensivos que puedan sumarse desde atrás. Junior es perfecto para un sistema de juego así y su sociedad con Messi parece que podría ser más que interesante. Además, con Quique Setién ha demostrado que es más que capaz de sacar el balón controlado desde atrás, algo que en Can Barça es indispensable.

Técnicamente, sin ser brillante, es un buen jugador y no se pone nervioso con el balón. Destaca sobremanera su capacidad para llegar a línea de fondo con potencia y aún así tener la tranquilidad y la habilidad de poner buenos centros al área. Todavía debe crecer en casi todos los aspectos de su juego, pero con 22 años ya parece un jugador con experiencia y calidad para jugar en el Barça.

Defensivamente debe mejorar

En ataque puede ser decisivo y en el futuro probablemente lo sea aún más, pero en defensa todavía tiene ciertas desconexiones que deben preocuparle. El internacional español debe mejorar en tareas defensivas para poder alcanzar su máximo potencial. En el Barça le atacarán menos que en el Betis y sus errores serán aún más evidentes, con lo que tendrá que prestar más atención. Si todo sale bien, Junior podría acabar convirtiéndose en uno de los mejores del mundo en su posición, pero tendrá que trabajar mucho para conseguirlo.