Las obras de remodelación del Spotify Camp Nou avanzan a buen ritmo. Debido al adelanto de los trabajo del Espai Barça, la tercera gradería del Gol Sur fue derribada, afectando el ingreso de los fanáticos abonados en ese sector. Debido a esto, la directiva del FC Barcelona confirmó que, a partir de este domingo, todos los socios y socias del club deberán presentar su nuevo carnet físico de abono 2022-23 para ingresar al templo culé.

De este modo, los socios ya no podrán utilizar el abono de la temporada pasada, ya que para la 2022-23 se eliminó el códio QR del carnet y, por ende, la descarga a dispositivos móviles del abono. Así, el ingreso para el partido ante el Celta (domingo a las 21:00H) solo podrán acceder a su localidad presentando la identificación física expedida por el club al momento de la compra del abono para esta temporada.

Los socios y socias abonados que no hayan recibido el abono correspondiente a la 2022-23 deberán contactar con la Oficina de Atención al Barcelonista (OAB) a través del correo oab@fcbarcelona.cat o del teléfono 900 1899 00. Las obras en la gradería del Gol Sur comenzaron hace tres semanas con el desmontaje del vídeomarcador y el anillo exterior, además del voladizo que sobresale de la fachada del Gol Sur y la mitad de la tercera gradería.

Los trabajos continuarán con mayor intensidad durante las semanas en las que se dispute el Mundial de Catar. El Barça disputará su último partido previo al parón mundialista el 6 de noviembre ante el Almería y no volverá a jugar en el templo culé hasta el 31 de diciembre, cuando reciba al Espanyol en el derbi catalán. En ese lapso de casi dos meses se completará la demolición de la tercera gradería y se habilitarán nuevas escaleras y vías de evacuación para la primera y segunda gradería.

Las dudas de los socios con la remodelación del estadio 

La exigencia del nuevo carnet de abonados es la primera de varias medidas que la directiva encabezada por Joan Laporta implementará durante la remodelación del estadio. En ese sentido, los socios se mantienen a la expectativa sobre el futuro de la remodelación del estadio, ya que por primera vez los abonados podrían arriesgarse a perder su localidad si se ausentan por un período prolongado del templo culé o, en su defecto, deberán acatar medidas que condicionarán su acceso al estadio, como la que entra en vigencia a partir de este domingo.