El paso de Antoine Griezmann por el FC Barcelona no dejó las mejores sensaciones tanto dentro del campo como en las gradas el Camp Nou. Su traspaso y sueldo millonario, además del rendimiento irregular dentro del primer equipo, marcaron las pautas de su cesión al Atlético de Madrid tan solo dos años después de su fichaje.

Sin embargo, en su estadía en Barcelona dejó algunos recuerdos que han sido desvelados en el programa 'Què T'hi Jugues' de la 'Cadena SER', siendo dos de ellos bastante llamativos. El primero fue la cláusula contractual que no cumplió dentro del club. El francés pidió llevar el dorsal '7' como una condición para vestir la elástica blaugrana, ya que era el número que utilizaba tanto en la selección como a nivel de clubes desde que jugaba en la Real Sociedad.

A pesar de ello, el atacante llevó el 17' durante su primer año como culé y se desconoce si la entidad compensó al futbolista de alguna manera porque estaba, de cierta forma, violando una de las exigencias del galo en su acuerdo. Eso sí, la marcha de Philippe Coutinho una campaña después le permitió cumplir su deseo y la situación no pasó a mayores.

El confeti

Otra anécdota se basa en las celebraciones del 'Principito'. En su debut en el templo culé frente al Betis, festejó uno de sus dos goles lanzando confeti al aire, algo que se volvió viral inmediatamente debido a la rareza del hecho. No obstante, esa no sería la única vez que lo haría, ya que volvió a repetirlo en una reunión en las oficinas del Barça.

Durante una 'cumbre' entre los ejecutivos y los jugadores donde se les explicaba las nuevas normativas de 'compliance', el jugador hizo acto de presencia tirando confeti y sacando varias carcajadas de sus nuevos compañeros de equipo. Un hecho que ayudaría a integrarle con el resto del grupo en su nueva travesía.