Philippe Coutinho llegó al FC Barcelona hace unas semanas con el desafío más importante de su carrera. El brasileño se embarca en una nueva aventura en su camino hacia los títulos, y además de unas tremendas exigencias deportivas, se enfrenta a un entorno completamente nuevo. La adaptación no parece ser un problema para el futbolista, que ya ha calado hondo entre sus compañeros.

El ex del Liverpool llegaba con buenas referencias de uno de los pesos pesados de la plantilla, un Luis Suárez al que conoce de su etapa en el Liverpool, pero en sus primeros días está superando con creces los comentarios de su amigo el uruguayo. No se ha limitado a pegarse al de Salto o a Paulinho, con los que tiene más confianza, sino que se mezcla con todos por igual.

"Cercano", "alegre" y "atento" son algunos de los adjetivos que se han escuchado en el vestuario sobre el recién llegado, que mantiene una prudencia y una naturalidad que prometen llevarle muy lejos. Además de tener la ventaja del idioma, su capacidad de sacrificio ha sido destacada por los técnicos, que valoraron muy positivamente los esfuerzos realizados para superar sus problemas físicos.

El primer paso

Como se encargó de recordar Ernesto Valverde en rueda de prensa, "ha entrado bien, pero esto es sólo el principio". A nivel personal, está derribando barreras muy pronto, y dentro de los terrenos de juego ha dejado muy buenas sensaciones tras su primeros minutos con la camiseta azulgrana. Coutinho es un fichaje que promete.