Como se esperaba, el atraco a mano armada sufrido por el FC Barcelona en el Benito Villamarín el pasado domingo ha traído consecuencias en el panorama arbitral. Y éstas han llegado en forma de toques de atención de la FIFA a los organismos españoles, pidiendo explicaciones por lo sucedido principalmente con el "gol fantasma" que entró 57 centímetros en la portería del Betis y no subió al marcador para el Barça.

El presidente de la Comisión de Árbitros de la FIFA, Pier Luigi Collina, habría telefoneado a Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), para hablar largo y tendido del asunto y pedir explicaciones, instando además al Comité de Árbitros de España a que tome las medidas necesarias como para que un suceso así no se vuelva a repetir.

Recordemos que las imágenes del "gol fantasma" del FC Barcelona han viajado por todo el mundo como la pólvora a través de la prensa internacional y las redes sociales, dejando en muy mal lugar tanto a LaLiga Santander como a sus prestaciones de calidad arbitral.

El asistente podría pagar las consecuencias

En España, según se hace eco el diario "Sport", al parecer el presidente del Comité Técnico de Árbitros, el ex árbitro Manuel Díaz Vega, habría llamado al árbitro Alejandro Hernández Hernández para recriminarle su actuación en el Benito Villamarín.

El presidente del Comité Técnico de Árbitros entiende que el colegiado canario tendría que haber dado el gol por válido, como estuvo a punto de hacer, sin necesitar de comprobar la postura de su juez de línea asistente, que no pudo ver bien la jugada desde su posición.

En esta coyuntura, finalmente los platos rotos podría pagarlos el árbitro asistente, Teodoro Sobrino, que podría pasar unas semanas en la "nevera" para que se calmen los ánimos, tanto en el FC Barcelona como en la FIFA y distintos estamentos.