Los datos y el juego demuestran que el Barça no puede vivir sin la posesión

No fue casualidad que el primer tanto del FC Barcelona en Sevilla el pasado fin de semana llegara en el minuto 20 de partido. El brasileño Raphinha anotó su primer tanto oficial como azulgrana en un momento en que el equipo de Xavi vivía sus peores momentos, probablemente de la temporada, después de que Ter Stegen hiciera al menos dos atajadas salvadoras ante ocasiones del conjunto de Nervión.

En el centro de la defensa, Araujo y Eric Garcia perdían su espalda constantemente y el equipo azulgrana no podía salir con el balón, asfixiados por la presión hispalense. El porcentaje de balón, en el minuto 15, era de 61% para el Sevilla y 39% para el Barça. Unas cifras que prueban que en el momento del 0-1 de Raphinha, el equipo de Xavi estaba lejos de ser el dueño del partido. 

Entre el gol y el cambio táctico que pidió el técnico a sus jugadores, el Barça empezó a tener una mejora evidente. A volver a casa, el staff revisó el partido y se dio cuenta de qué había pasado en esos minutos iniciales, según apunta una información de 'Mundo Deportivo'. Los dos interiores no entraban en juego. En esos primeros casi 20 minutos, Pedri y Gavi no tocaban el balón y veían constantemente como el Barça debía saltar líneas.

De hecho, Pedri tocó el primer balón a los 4 minutos y 56 segundos de encuentro. Gavi no lo toca hasta el minuto 6’12’’ y fue para cometer una infracción. El mediocampista de 18 años tuvo control del balón solo hasta la fracción 18 de partido. Ya los 20 roba el esférico para iniciar la jugada donde Lewandowski termina una gran maniobra para Raphinha en su primera celebración en Liga como culé.

Dato que todos vieron 

Si el cuerpo técnico de Xavi observó esta situación, es seguro que sus rivales también. Cualquier equipo, con los medios suficientes, entenderá que ahora mismo el lado débil del Barça pasa por anular lo más posible a sus interiores. Aunque la lección parece estar aprendida para Xavi necesita tener respuestas rápidas a la mano ante una situación así, o podría ya ir abajo en el marcador por uno o dos goles en 20 minutos.