Puede decirse que el paso de Douglas Pereira por el FC Barcelona fue casi invisible en cuanto a minutos disputados en las dos temporadas que estuvo allí. Tiempo en el que recayó una y otra vez en repetidas lesiones musculares que acabaron con la paciencia de los técnicos del equipo azulgrana, que prefirieron que el jugador saliera cedido al Sporting de Gijón para ver si allí tiene más suerte. Ahora, y con la racha de lesiones acortada, el brasileño se lamenta de los malos momentos vividos en Can Barça.

"En Barcelona pase momentos complicados con las lesiones. Cada día llegaba a casa llorando, pero es lo que hay", dijo el lateral en una entrevista reciente para el diario "El Comercio".  el mismo Douglas explicó como fue su juventud: "De pequeño soñaba con ser jugador. lo veía difícil, pero fui avanzando. Ahora, otra vez. Hay que afrontarlo y seguir".

Pero el brasileño no ha querido callarse y se mostró duro con los medios. "El entorno siempre ha sido fuerte contra mi persona. Además de las lesiones que he tenido que superar, eso puede crearte una pelota de fuego en la cabeza. Pero tengo que mantenerme fuerte por mi familia, por la gente que me quiere", afirmó el carrilero.

También negó haberse lesionado por una mala postura al dormir en el bus de vuelta a Vigo hace unas semanas. "Eso estuvo muy mal. Fue una sobrecarga y un masaje. Al día siguiente estaba entrenando. Y pusieron que estaba lesionado. No lo estaba. Son detalles que me dejan triste. Después del primer amistoso que jugué se me cargaron los gemelos por la inactividad y pusieron también que estaba lesionado. Es lo que me toca", concluyó.